Actualizado 29/01/2008 17:33

Argentina.- Dos argentinos a los que se negó la entrada en El Prat y les llamaron "sudacas" demandan al Estado español


BUENOS AIRES, 29 Ene. (Del corresponsal de EUROPA PRESS Rafael Saralegui) -

Una pareja de bailarines argentinos ha presentado una demanda contra el Estado español ante un tribunal de la ciudad de Córdoba, la segunda en importancia del país, por haber sido maltrados y discriminados cuando llegaron al aeropuerto de Barcelona, donde fueron retenidos durante 48 horas y expulsados del país.

Walter y María Silva son bailarines del ballet oficial de la provincia de Córdoba, y en noviembre pasado habían viajado a Barcelona para asistir a la boda de un familiar, pero la policía no les permitió ingresar en el país y, según los demandantes, les llamaron "sudacas".

El abogado Alejandro Severín, que representa a la pareja, afirmó a la prensa que presentó una demanda ante un tribunal federal de la provincia de Córdoba, en la que se pidió un resarcimiento de un millón y medio de pesos (unos 320.000 euros) "por discriminación y malos tratos".

En declaraciones a la una emisora de radio, recogidas por Europa Press, el letrado explicó que se realizó "una demanda penal en contra de los cuatro policías españoles que dependen de Migraciones, que tenemos identificados por número de placas, por el delito de discriminación".

"La justicia argentina es competente para hechos ocurridos en territorios del espacio internacional, porque ellos nunca ingresaron a España, y porque fueron privados de su libertad y su documentación durante 48 horas y recién la recuperaron cuando aterrizaron en el aeropuerto de Córdoba", agregó Severín.

Según la pareja, a su llegada a Barcelona se iban a alojar en el domicilio de un familiar, en ese momento llevaban 200 euros en efectivo, y tarjetas de crédito internacionales, además de contar con los billetes de regreso a Argentina, además de tener toda su documentación en regla.

El abogado precisó que al llegar al aeropuerto de Barcelona "son arbitrariamente separados de la fila, llamados despectivamente 'sudacas', como si fueran invasores, y detenidos durante 48 horas en condiciones infrahumanas", y añadió que "esto es lo que está pasando con los latinoamericanos".