Actualizado 24/07/2008 21:43

Argentina.- El ex general Menéndez justifica la represión ilegal durante la dictadura

Dice que espera "que los guerrilleros del setenta ahora en el poder no puedan imponer su régimen autoritario"


BUENOS AIRES, 24 Jul. (Del corresponsal de EUROPA PRESS Rafael Saralegui) -

El ex represor general Luciano Benjamín Menéndez justificó la represión ilegal llevada adelante por las fuerzas armadas durante la dictadura militar (1976-1983) con el argumento de que el país vivía una guerra, al hablar en el juicio en el que está siendo juzgado por el secuestro y homicidio de cuatro militantes políticos en 1977.

"Los delincuentes subversivos ensangrentaron el país durante 10 años, en los cuales asesinaron a 1.500 personas", dijo Menéndez y se quejó porque "este es el primer país que juzga a sus soldados victoriosos que lucharon y vencieron por orden de y para sus compatriotas". Y agregó: "Los marxistas no conciben la armonía y la concordia sino el conflicto permanente".

La fiscalía y la querella pidieron que Ménendez y otros ex represores fueran condenados a prisión perpetua. Pero antes de escuchar la sentencia, esta misma tarde, el tribunal le dio al ex general el derecho a expresar sus últimas palabras antes del fallo.

Fue entonces cuando Ménendez dijo que el país vivió durante la dictadura "una guerra" con las organizaciones guerrilleras ERP y Montoneros, en un discurso que provocó la reacción de los asistentes a la audiencia y de los familiares de las víctimas, que fueron desalojados de la sala.

"Antes los terroristas estaban en la ilegalidad, ahora pretenden ser ciudadanos atados a la Constitución. Confío que los guerrilleros del 70 ahora en el poder no puedan imponer su régimen autoritario", agregó Menéndez, quien fue el jefe del Tercer Cuerpo de Ejército con asiento en la provincia de Córdoba, en el centro del país.

El ex general y otros siete ex represores son juzgados por el secuestro, tortura y homicidio de cuatro militantes del Partido Revolucionario del Pueblo, ocurrido en 1977, en el centro clandestino de detención conocido como La Perla.