Actualizado 20/07/2008 04:47

Argentina.- El gobernador bonaerense aboga por que el país mire al futuro y aproveche sus oportunidades tras la crisis

BUENOS AIRES, 20 Jul. (Reuters/EP) -

Daniel Scioli, gobernador de la provincia de Buenos Aires por el partido del Gobierno de Argentina, aseguró ayer que el país sudamericano debe mirar hacia adelante y pensar en las oportunidades que se le abren tras el fin de una extensa crisis política por una disputa entre el Gobierno y el sector agropecuario.

Tras más de cuatro meses de disputa por un aumento en los impuestos a las exportaciones agrícolas que incluyó acusaciones de desestabilización, huelgas, desabastecimiento de alimentos, cortes de rutas y violencia en las calles, el Gobierno cerró el viernes la crisis, dando un paso atrás al anular la medida.

La decisión, aplaudida por el sector rural, la oposición y los mercados, llegó después de que la presidenta, Cristina Fernández, no lograra que el Congreso ratificase el aumento de los impuestos sobre la soja y sus derivados, que es el mayor complejo exportador del país.

Scioli, un fiel aliado de Fernández que gobierna la provincia de Buenos Aires, la más rica y poblada del país, opinó en una entrevista radiofónica que "es necesario dejar atrás los desencuentros y mirar hacia el futuro". También pidió al sector agropecuario que "se sume con fuerza al Acuerdo del Bicentenario", un proyecto de la presidenta que busca fijar metas de desarrollo para el país hacia el 2010, cuando se cumplirán 200 años de la declaración de independencia del país.

Fernández se reunió el viernes por la noche con los 150 legisladores que la apoyaron en la dura batalla que se libró en el Congreso por la polémica medida y les agradeció su apoyo.

La derrota del Gobierno se desató el jueves por la madrugada en el Senado, cuando tras un empate en la votación, el vicepresidente, Julio Cobos, votó en contra del proyecto y acabó con la iniciativa.

A pesar de todo, Fernández no considera que haya sido una derrota, según explicó el viernes Miguel Angel Pichetto, jefe del bloque oficialista en el Senado, que participó del encuentro con la mandataria. Pichetto aseguró que Fernández "no consideró de ninguna manera que hubiésemos tenido una derrota" y añadió que se dirigió a los legisladores que votaron afirmativamente agradeciéndoles que hayan "cumplido con la plataforma electoral y los lineamientos expresados en la campaña".

La extensa crisis generó daños a la economía, especialmente en el interior del país donde el sector agropecuario es clave, al mismo tiempo que derrumbó la imagen de la presidenta -criticada por haber extendido el enfrentamiento- y agobió a la población, en su mayoría ajena a la disputa.