BUENOS AIRES, 4 Oct. (Del corresponsal de EUROPA PRESS Rafael Saralegui) -
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) tuvo un incremento del 0,8 por ciento en septiembre y acumula en el año una subida de 5,8 por ciento, según informó esta tarde el cuestionado Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), envuelto en una polémica por el descreimiento que generan sus mediciones.
Analistas privados calculan que la inflación de septiembre fue el doble de la oficial, en torno a un 1,7 por ciento, mientras que calculan que para fin de año podría llegar hasta un 17 por ciento, muy por encima del 10 por ciento que pronostica el gobierno del presidente Néstor Kirchner.
Según el INDEC, las mayores alzas se produjeron en el rubro "equipamiento y mantenimiento del hogar", con el 1,8 por ciento, y en "transporte y comunicaciones", con el 1 por ciento, mientras que el rubro "alimentos y bebidas" trepó un 0,7 por ciento en septiembre.
Ese incremento es que más llama la atención, debido a que asociaciones de consumidores denuncian un notable aumento en el rubro verduras: por ejemplo, el kilo de tomates aumentó un 300 por ciento en los dos últimos meses, de acuerdo con los registro del Mercado Central.
El INDEC se haya envuelto en una crisis desde comienzos de año, cuando fueron desplazados varios funcionarios de carrera, mientras los empleados denuncian que las mediciones son modificadas para satisfacer el deseo del gobierno de mantener una inflación contenida.