BUENOS AIRES, 28 (Reuters/EP) -
Boca Juniors y River Plate volverán a disputar el domingo el clásico más importante del fútbol argentino por la décima jornada del Torneo Final, aunque será una versión opacada por el bajo rendimiento de ambos y por prohibición de que asistan hinchas visitantes por cuestiones de seguridad.
El partido, que comenzará a las 18.15 hora local (2115GMT) en el estadio la "Bombonera", será dirigido por primera vez en forma oficial por Néstor Pitana, el arbitro argentino designado por el país para estar en el Mundial de Brasil.
Boca, que con 12 puntos está duodécimo en las posiciones -a 6 del puntero Colón-, buscará una victoria que le permita levantar su nivel e involucrarse en la lucha por el título. El equipo xeneize viene de empatar dos partidos consecutivos contra Argentinos Juniors y Quilmes, con un nivel de juego mediocre.
River, que está quinto con 14 puntos, tendrá como objetivo sumar los tres puntos para acercarse al líder del torneo y terminar con 10 años sin triunfos en la casa de su eterno rival.
La última victoria de River fue 1-0 en el Clausura 2004 con gol de Fernando Cavenaghi, quien el domingo intentará repetir y, como dijo el artillero, dedicarle el gol a los hinchas ausentes.
"Si lo hago me beso la camiseta en representación para todos los hinchas de River que no van a poder estar en el estadio", dijo Cavenaghi, que volvió esta temporada a River y está cumpliendo su tercera etapa en el club.
Boca, en tanto, tendrá en el veterano Juan Román Riquelme a su jugador más desequilibrante, aunque su rendimiento dependerá de cómo responda su físico después de entrenar en forma diferenciada en la semana.
El técnico de Boca, Carlos Bianchi, tiene una sola duda para la alineación del domingo: quién acompañará en el ataque a Emmanuel Gigliotti, si el delantero Juan Manuel Martínez o el juvenil Luciano Acosta.
Por su parte, Ramón Díaz definió que el colombiano Teófilo Gutiérrez vuelva al equipo y forme la dupla ofensiva junto a Cavenaghi, y que Ramiro Funes Mori sea el reemplazante del defensor Lionel Vangioni, suspendido.
EXTREMA SEGURIDAD
El comité de seguridad deportiva decidió afectar a 1.020 agentes para cuidar el orden en los alrededores y dentro del estadio de Boca, y para controlar el ingreso de los 27.525 socios del club habilitados para presenciar el partido.
Las autoridades temen un enfrentamiento entre las dos facciones de hinchas violentos de Boca que mantuvieron luchas sangrientas por el poder de la tribuna y los negociados que les deja el fútbol, como reventa de entradas, puestos de venta de comidas y estacionamientos en los alrededores del estadio.
Los hinchas de River, para compensar su ausencia obligada, convocaron a un "banderazo" en las puertas del estadio Monumental en apoyo a sus jugadores, a los que acompañarán en caravana hasta donde el operativo de seguridad les permita llegar.
EL RESTO DE LA FECHA
La jornada se iniciará el viernes con los partidos entre All Boys y Godoy Cruz, Estudiantes de La Plata -que de ganar puede superar a Colón en la cima- y Olimpo de Bahía Blanca, y Belgrano de Córdoba frente a Argentinos Juniors.
El sábado Vélez Sarsfield enfrentará a Gimnasia y Esgrima La Plata, Newell's Old Boys a Quilmes, y Atlético Rafaela a Racing Club.
El domingo, además del clásico Boca-River se enfrentarán Lanús-Rosario Central, Arsenal-Colón, y Tigre-San Lorenzo.