Actualizado 20/06/2008 04:35

Bolivia.- Morales se muestra optimista frente al desafío de las autonomías

TARIJA (BOLIVIA), 20 Jun. (Reuters/EP) -

El presidente de Bolivia, Evo Morales, dijo ayer que está seguro de que saldrá airoso de un referéndum revocatorio de mandato convocado para agosto, pese al avance de la oposición derechista en los distritos más ricos que reclaman su autonomía.

Morales mostró su optimismo en un encuentro con corresponsales de la prensa internacional en La Paz, mientras autoridades y líderes cívicos de la provincia de Tarija cerraban la campaña para un cuarto y último referendo regional que pondría en vigencia un estatuto de autogobierno.

"Si mañana se celebrase el referéndum, yo sé que obtendríamos el 54 por ciento, hasta me atrevería (a decir) que mejorará aún más, ampliamente, en el campo hasta un 75 por ciento", dijo el mandatario indígena, quien está cerca de cumplir la mitad de su mandato quinquenal.

Según la ley del referendo revocatorio, Morales, íntimo amigo de Hugo Chávez, perderá el cargo sólo si los votos en su contra superan el 54 por ciento de apoyo electoral con que llegó al poder en enero de 2006.

Restando importancia al avance de las autonomías, el presidente boliviano aseguró que en realidad la batalla final en la actual crisis política del empobrecido país altiplánico tendrá lugar el 10 de agosto, en el referendo revocatorio, al que se someterán también los prefectos regionales, la mayoría opositores, que no parecen muy de acuerdo ante esa consulta.

"Nos pidieron revocatorio el año pasado y acepté contento, pero que todos nos sometamos, y ahora los prefectos no quieren. Yo por lo menos estoy convencido de que muchos prefectos serán revocados, ojalá todos y así no haya una tranca, bloqueadores de este proceso de cambio," agregó.

DESAFÍO CRECIENTE

Si Tarija aprueba el próximo domingo su estatuto de autonomía, cuatro de los nueve departamentos bolivianos habrán consolidado un frente antigubernamental, en el mayor desafío derechista a la "revolución democrática y cultural" de Morales.

El gobernante calificó como "fiesta ilegal e inconstitucional" al referendo organizado para el domingo en Tarija, manteniendo la misma posición que asumió ante consultas similares realizadas en el último mes y medio en el rico distrito oriental de Santa Cruz y en los amazónicos Beni y Pando.

Con las demandas de autonomías regionales, la derecha ha logrado frenar desde principios de año el cambio de Constitución impulsado por Morales para "refundar" el país dando más poder a los indígenas y consolidando, vía nacionalizaciones, el control estatal sobre la economía.

Este enfrentamiento político dejó al descubierto grandes contrastes económicos y sociales entre las tierras bajas orientales y sureñas, donde la derecha se hace fuerte, y los distritos andinos concentran el respaldo del primer presidente indígena de Bolivia.