Actualizado 28/08/2008 04:30

Brasil.- La justicia brasileña posterga su decisión sobre el futuro de una reserva indígena

BRASILIA, 28 Ago. (Reuters/EP) -

La corte suprema de Brasil postergó ayer una decisión sobre el futuro de una extensa reserva indígena del norte del país, centro de un fuerte debate y conflictos violentos entre indios y agricultores.

El Supremo Tribunal Federal (STF), horas después de comenzar a analizar el caso, suspendió sus deliberaciones al pedir uno de sus miembros tiempo para examinar el caso, sin que se estableciera de inmediato una fecha para su reanudación. El STF debe decidir si ratifica o anula la demarcación del territorio indígena Raposa Serra do Sol, a petición de dos senadores del estado de Roraima, en el norte del país donde está enclavada la reserva de 1,74 millones de hectáreas.

Antes de la suspensión de las deliberaciones a petición del juez Carlos Alberto Menezes, el miembro informante del tribunal, Carlos Ayres Britto, votó por mantener la demarcación de la reserva, en el único pronunciamiento emitido. El presidente del tribunal, Gilmar Mendes, dijo que quería que se llegara a una conclusión del caso este año.

Los senadores presentaron su petición de anulación del decreto que demarcó la reserva por considerar que el laudo antropológico en que se basó contuvo graves errores. Otra treintena de recursos fueron presentados ante el STF por el mismo caso, que deberán ser respondidos de acuerdo con la primera decisión.

La reserva, donde viven unos 19.000 indígenas de cinco etnias pero también otras comunidades, fue establecida hace tres años por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva. Sus críticos sostienen que la demarcación no debe ser continua, sino en "islas" que contemplen la diversidad de sus habitantes y permitan la circulación de no indígenas en la región.

El caso provocó un fuerte debate en torno a los derechos indígenas, con la Iglesia Católica, ecologistas y etnias indígenas que apoyan los actuales límites del territorio, y políticos y empresarios del agro que se oponen. Los planes de sacar de la reserva a agricultores, madereros y mineros después de que se estableció el territorio fue resistida por éstos.

El más reciente conflicto en el área se produjo cuando la policía intentó en abril retirar a plantadores de arroz de la reserva. Los agricultores se resistieron y bloquearon caminos, destruyeron puentes y fueron acusados de contratar pistoleros. Diez indios resultaron heridos durante una confrontación y un líder de los agricultores fue detenido.

Legisladores y el Gobierno de Roraima sostienen que el área de la reserva es excesiva para el número de indígenas que la habitan y va contra el desarrollo económico del estado. Asimismo, el comandante militar de la Amazonia y legisladores conservadores han sostenido que la demarcación de la fronteriza reserva podría comprometer la seguridad nacional, por el posible ingreso de guerrilleros colombianos y narcotraficantes.

El titular de la estatal Fundación Nacional del Indio (Funai), Marcio Meira, declaró el mes pasado a Reuters que la eventual anulación de la demarcación por el STF sería el mayor revés para los derechos indígenas desde el fin del régimen militar que gobernó Brasil entre 1954 y 1985. El presidente de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil, Geraldo Lyrio Rocha, pidió por su parte la semana pasada a la corte de justicia que confirmara la demarcación de la reserva Raposa Serra do Sol.

El prelado dijo a la prensa que una decisión contra la demarcación podría afectar el derecho constitucional de los indígenas que habitan el territorio. "Sería un retroceso enorme," afirmó.