Foto: UESLEI MARCELINO / REUTERS
BRASILIA, 23 Feb. (EUROPA PRESS) -
Al menos 120 personas han sido detenidas este sábado en una protesta realizada en el centro de la ciudad brasileña de Sao Paulo contra la celebración del Mundial de fútbol de Brasil que ha sido secundada por cerca de un millar de manifestantes y vigilada por alrededor de otro millar de agentes de la Policía Militar.
El enorme despliegue de seguridad no ha conseguido impedir que se hayan reproducido los disturbios en varias fases de la protesta. Grupos de manifestantes han lanzado botellas, han incendiado contenedores de basura y han causado daños en sucursales bancarias. La Policía Militar ha respondido con el lanzamiento de gas lacrimógeno.
Como resultado, cuatro policías y dos manifestantes han resultado heridos con cortes y magulladuras por los choques. Asimismo, otros cinco periodistas han sufrido agresiones y han sido retenidos por la Policía militar, que después les ha liberado.
Entre ellos se encontraban profesionales de los periódicos 'Folha do Sao Paulo' y 'O Globo'. La Secretaría de Seguridad Pública ha lamentado la agresión sufrida por los manifestantes en un comunicado emitido después de las protestas.
Gran parte de los detenidos, que han sido trasladados a cuatro centros de detención de Sao Paulo, están acusados de actos vandálicos y de la utilización de artefactos explosivos como cócteles molotov y lanzar piedras contra las fuerzas de seguridad.
POLICÍAS NINJA
La Policía Militar ha logrado cercar durante la manifestación a un grupo de miembros del denominado 'Black Blocs', conocido por desencadenar los altercados en las manifestaciones contra el Gobierno y que, en esta ocasión, estaba integrado por 150 personas.
La marcha ha discurrido entre pancartas y gritos en contra de la celebración del torneo, prevista para el próximo mes de junio y julio, con lemas como 'No habrá Copa, no habrá Copa'.
En esta ocasión, la Policía Militar ha estado compuesta por miembros pertenecientes al 'Escuadrón Ninja', especializado en las artes marciales y en el manejo de armas de fuego, y que por primera vez ha intervenido en una manifestación.
Según el portavoz de la Policía Militar, Emerson Massera, en declaraciones a la agencia estatal de noticias brasileña, este contingente actuará "de manera puntual" y recurrirá a técnicas "menos agresivas" para aplacar a los violentos.
Más de 14.000 personas confirmaron su asistencia al evento convocado a través de la red social Facebook, en la que los promotores denuncian que "la población no fue consultada sobre lo qué precio va a pagar" para la celebración del Mundial de fútbol y que critica que se trate de "un gran espectáculo financiado con dinero del contribuyente".