MADRID, 3 Jul. (CHANCE) -
La familia Sánchez Vicario, esta envuelta en un gran lío mediático, desde el minuto que Arantxa Sánchez Vicario publicó su libro Arantxa ¡Vamos! A partir de ahí, la extenista, comenzó una batalla legal contra sus padres, ya que exige la anulación del documento en el que otorgó a sus padres el uso de un piso situado en la avenida Diagonal de Barcelona.
UN PATRIMONIO EN JUEGO
Y es que, dicho piso lo cedió la extenista en usufructo a sus padres hasta que estos falleciesen, sin embargo, Artantxa Sánchez Vicario inició una pelea judicial para que el documento que en su día acreditaba esta situación sea anulado.
Tanto Marisa Vicario Rubio, como Emilio Sánchez Benito se encuentran muy dolidos ante esta situación y mucho más después de que la extenista publicase un libro donde no dejaba a sus padres bien parados, acusándoles de haberse gastado la inmensa fortuna que ella había generado al ser tenista profesional.
Diversas querellas contra sus padres han hecho que la distancia entre ellos sea mucho mayor. A través de un comunicado que suena casi a arrepentimiento y disculpa, los padres han querido informar a los medios.
UN PADRE IMPUTADO
El pasado 27 de Junio, la Audiencia de Barcelona imputaba al padre de Arantxa, a uno de sus hermanos, al abogado Bonaventura Castellanos y al economista Francisco de Paula por los presuntos delitos de apropiación indebida, administración fraudulenta, falsedad en documento público y deslealtad profesional.
A partir de este momento, la familia Sánchez Vicario, está en guerra. La extenista ha comenzado una batalla que está perjudicando en parte a todos los miembros de su familia, sobre todo sus padres, que no comprenden la reacción que está teniendo su hija.
UN HERMANO OFENDIDO
Cuando Javier Sánchez Vicario se enteró de su imputación, no ha dudado en arremeter contra su hermana. Imputado junto a su padre, el hermano de la extenista enviaba un comunicado a través de su abogado Javier Val sobre el tema.
En dicho comunicado, Javier Sánchez Vicario comenta que no negociará al margen de los tribunales ni firmará "ningún tipo de acuerdo al respecto". También ha precisado que "jamás" se apropió de ningún bien o derecho titularidad de su hermana, y que tampoco ha cometido nunca ningún tipo de irregularidad al respecto.
Javier ha mostrado su "más absoluta disposición" para llegar hasta el final en los tribunales con el fin de salvaguardar sus derechos, dignidad, integridad personal y prestigio profesional, y ha recordado que, por el momento, todas las reclamaciones que se han dirigido contra él se han archivado por falta de fundamento.
Y es que después de conocer la noticia de que está imputado, Javier se ha sentido muy ofendido por todo lo que está haciendo su hermana, ya que parece que la extenista está dispuesta a llevar a su familia al completo a los tribunales.
Y UN BEBÉ EN CAMINO
Emilio Sánchez Vicario, otro de los hermanos de la extenista, está esperando un nuevo bebé en camino y parece que en el peor momento que está viviendo su familia.
Sin ser un hijo buscado, Emilio tendrá con su mujer Simona Bronzetti su cuarto hijo. La esposa del extenista, se encuentra embarazada de cuatro meses y espera un niño, luciendo una incipiente barriguita. Un bebé que llega a una familia en completa discordia y que parece que vivirá su peor momento en los tribunales.
No sabemos como acabará la historia, pero los Sánchez Vicario les queda aún un largo camino para ver el final de este entuerto y mucho más una reconciliación con Arantxa Sánchez Vicario, que deja palpable el rencor que tiene a su familia.