SANTIAGO, 3 Jul. (de la corresponsal de EUROPA PRESS Claudia Riquelme) -
Una chilena que, junto a su hija de 11 años, fue deportada desde el aeropuerto de Madrid-Barajas, denunció hoy haber sido víctima de malos tratos en el aeropuerto y anunció que, a través del Ministerio de Asuntos Exteriores, exigirá a España una explicación por una situación que considera "injusta".
En declaraciones a una emisora de radio de Santiago, Nelly Zúñiga Opazo relató que viajó a la capital española para visitar a una prima chilena que reside en Madrid. Compró el billete de avión hace seis meses -una práctica común en Chile- y éste tenía fecha de expiración en julio.
Así, explicó que al intentar ingresar a España por Barajas, fue interrogada durante cuatro horas, arrestada durante 24 horas, le fue retenido su pasaporte y estuvo junto a su hija "en una sala del aeropuerto con un número indeterminado de personas, sin poder pedir agua ni comida".
Dijo que recibió una alimentación imposible de ingerir, ya que estaba en mal estado y que su hija sólo pudo comer un chocolate que le regaló otra menor israelí. "La carta de invitación la tramitaron hace seis meses en Madrid. Entonces mi pasaje vencía en este mes, lo compré seis meses atrás. Yo les expliqué eso y me dijeron que no era válido. Yo lo entendí por esa parte, pero no entendí el maltrato que me dieron", dijo la mujer a la radio.
Zúñiga dijo que la selección de las personas para la revisión de sus documentos en el aeropuerto se realizó de manera arbitraria, pues "habían personas que no llevaban cartas de invitación y pasaron con 'alfombra roja'. Era 'tú sí, tú no, tú sí, tú no'. Una lotería".
"Quiero ir donde sea, porque el dolor que siento por lo que mi hija pasó, no se lo doy a nadie. Y si los chilenos pretenden ir a España, que no vayan o que vayan sin sus hijos", dijo la mujer.