Publicado 02/06/2014 19:07

El Gobierno de Chile aclara que no "promueve" el aborto, sino despenalizarlo en casos "muy particulares"


SANTIAGO, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -

La ministra de Salud de Chile, Helia Molina, ha salido al paso de quienes critican al Gobierno por su proyecto de ley sobre el aborto y ha subrayado que no se trata de una normativa para "promover" la interrupción voluntaria del embarazo, sino para despenalizarla en casos "muy particulares".

El pasado 21 de mayo, durante la presentación de su primer balance de Gobierno, la presidenta Michelle Bachelet anunció que presentará un proyecto de ley para despenalizar la interrupción del embarazo en tres supuestos: peligro para la vida de la madre, inviabilidad del feto y violación.

La propuesta ha recibido críticas desde la oposición y la Iglesia, pero el Ejecutivo ha intentado desmarcarla de cualquier trasfondo ideológico.

"Como Gobierno no estamos promoviendo el aborto, proponemos despenalizarlo en tres situaciones, que son muy particulares", ha insistido este lunes Molina en una entrevista con Chilevisión. La ministra ha abierto la puerta a "discutir con el país" la reforma, que podría quedar lista para el segundo semestre de 2014.

El Gobierno calcula que 20.000 mujeres interrumpen su embarazo de forma voluntaria cada año y ha lamentado que "casi todos" los que discuten sobre el tema sean hombres, según 'El Mercurio'. "Es muy difícil saber desde la percepción masculina lo que significa ser violada y maltratada para una mujer", ha apostillado.

Sobre la posibilidad de legalizar el "aborto abierto" --mediante un sistema de plazos por ejemplo--, la ministra lo ha descartado, ya que considera que "no tiene mucha justificación real". Molina ha defendido que "hoy hay mucha facilidad para no quedarse embarazada", con "múltiples sistemas que antes no existían".