SANTIAGO, 14 May. (De la corresponsal de EUROPA PRESS Claudia Riquelme) -
En una votación de siete votos a favor y dos abstenciones, la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado aprobó hoy la permanencia de las tropas militares chilenas que actualmente se encuentran realizando labores de paz en Haití como apoyo a las labores de pacificación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El ministro de Asuntos Exteriores, Alejandro Foxley, quien expuso sobre los alcances de esta determinación, agradeció el respaldo de los integrantes de la Cámara Alta.
Sobre los beneficios que significará para Haití seguir contando con apoyo de las tropas chilenas, el ministro Foxley señaló que se debe llevar a cabo la transición "de una misión que es una fuerza puramente de paz pero militar, a una fuerza de cooperación para el desarrollo económico y social".
Argumentó que las tropas chilenas tienen "programas de dos tipos: de apoyo en educación escolar en las zonas rurales más pobres y de asistencia técnica para mejorar la producción de alimentos básicos, también en zonas rurales".
Foxley indicó que esta determinación fue tomada con el fin de reinterpretar el objetivo de la misión permanente en Haití --hasta ahora con una marcada estigmatización bélica--, para adecuarla a la cooperación social que debe desempeñar. "Nosotros podemos extender fuertemente la colaboración en áreas sociales como esas. Lo que no podemos hacer, es hacerlo todo al mismo tiempo", dijo.
El jefe de la diplomacia chilena se comprometió, junto con el Ministerio de Defensa, a aumentar la cantidad de cupos para que efectivos de seguridad haitianos puedan perfeccionarse en las academias policiales de nuestro país.
"Hoy tenemos 22 policías en las academias policiales en Chile y esperamos subir ese número a 50 el próximo año y, eventualmente, llegar a 100. Tal vez, los 100 no se van a formar en Chile. Algunos los formaremos nosotros en Haití, y otros en Chile en las academias policiales. En eso hay unanimidad entre todos los sectores políticos", dijo.
Foxley resaltó que el trabajo de Chile en Haití se enmarca en dos prioridades de la política exterior chilena, como son el compromiso con la región y la solidaridad con los países que requieren apoyo para poder avanzar hacia la consolidación de sus instituciones.