PARIS, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, se declaró hoy dispuesto a acudir él mismo en persona a la selva colombiana para recoger a Ingrid Betancourt cuando ésta sea liberada por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), después de que los ex parlamentarios colombianos liberados ayer por la guerrilla anunciaran que el estado de salud de la ex candidata a la presidencia es muy malo.
Asimismo, desde Sudáfrica, pidió hoy a su homólogo venezolano Hugo Chávez "usar toda su influencia" para salvar la vida de la franco-colombiana, secuestrada hace seis años por las FARC. "Me dirijo al presidente Chávez y saludo la implicación y los esfuerzos que han permitido devolver ayer a la vida a cuatro rehenes. Le pido usar toda su influencia para salvar la vida de Ingrid Betancourt", señaló el presidente galo.
En su opinión, la suerte de Betancourt depende "de un gesto humanitario y no de un acuerdo humanitario". "Hoy es una carrera contra la muerte", aseguró, expresando su disposición a ir él mismo a buscar a Betancourt a la frontera entre Venezuela y Colombia "si se pusiera esa condición". Además, garantizó que Francia permanecerá movilizada "hasta que salga el último rehén". "Me comprometo personalmente", sostuvo.
Sarkozy recordó que en diciembre, hace ya casi tres meses, lanzó un llamamiento al jefe de la guerrilla, Manuel Marulanda, para que liberara a los rehenes y que desde entonces se han producido las liberaciones de seis secuestrados que "han vuelto a la vida", pero también le pidió liberar a Ingrid y que esta petición "sigue sin respuesta".
También el primer ministro galo, François Fillon, reclamó a la guerrilla la liberación de Betancourt, advirtiendo a las FARC que "el mundo entero les condenará" si no lo hace debido al mal estado de salud de la rehén. "Esta mujer está enferma" por lo que "ahora es realmente responsabilidad de las FARC". "Es con el juicio de la historia con quien tienen cita ahora las FARC", remachó.
LLAMAMIENTO DE LA FAMILIA
Por su parte, la familia de Ingrid Betancourt hizo hoy un llamamiento a los jefes de Estado de todo el mundo para que den su apoyo al presidente de Colombia, Álvaro Uribe, con la finalidad de que acepte "con valentía y en el más breve plazo posible" discutir con las FARC las condiciones de "un acuerdo humanitario en la zona de Pradera y Florida" con el apoyo y la presencia de la comunidad internacional.
Esta petición está recogida en el denominado 'llamamiento de París por un acuerdo humanitario inmediato' presentado hoy en la capital gala por el Comité de Apoyo a Ingrid Betancourt en una multitudinaria rueda de prensa convocada tras conocer el alarmante estado de salud de la antigua candidata presidencial colombiana.
En la misma, su ex marido Fabrice Delloye aseguró que se trata de una situación de "urgencia humanitaria absoluta" por lo que "no hay otra posibilidad más que lucha por el acuerdo humanitario". "Ingrid se está muriendo", añadió Delloye, que también pidió a las FARC facilitar el acceso a una misión médica a la zona donde se encuentra retenida Betancourt.
Recordó que la secuestrada padece hepatitis desde hace tiempo y que es consciente de que, "a pesar de todos sus esfuerzos" sabe que será la última en salir de la selva. "Y ya no tiene fuerzas", dijo. A su modo de ver no se puede esperar "la buena voluntad" de las FARC porque su gesto humanitario se detiene con las cuatro últimas liberaciones, tal y como anunció la propia guerrilla.
Por eso, cree que las FARC sólo irán "más lejos" si Uribe "responde positivamente" accediendo a despejar la zona de Pradera y Florida de manera que se facilite el acuerdo humanitario. "No tenemos un instante que perder. No tenemos tiempo", alertó Delloye.
La misma urgencia expresó el hijo de Betancourt, Lorenzo Delloye. "No tenemos más tiempo. Es tan simple como eso. Si no reaccionamos rápido, mamá va a morir", advirtió. También puso de relieve que las fuerzas internacionales de interposición darán garantías al Gobierno colombiano y las FARC de que "no arriesgan nada" porque no se trata, dijo de una operación "de seguridad" sino "humanitaria".
Junto a Lorenzo y Fabrice se encontraba Consuelo González de Perdomo, liberada en enero pasado por las FARC, quien hizo un emotivo llamamiento para que el presidente Uribe tienda la mano a los secuestrados y permita que regresen a la libertad.
"Señor presidente, por favor, démosles la mano. No permitamos que no resistan. Ayudémosles, por favor. Y a la comunidad internacional le pido toda la consideración. Necesitamos de ustedes para que colombianos y extranjeros regresen a sus casas, a sus familias y disfruten de la libertad", dijo entre lágrimas.
González de Perdomo recalcó que "lo humano está por encima de lo político, por encima de lo económico y por encima de todas las facetas de la vida" y, en su opinión, la zona rural de Pradera y Florida sería una "oportunidad inmensa" que se brindaría a los secuestrados. "Necesitamos, presidente su acción efectiva, como lo han sido todos sus actos", subrayó.
Finalmente, confió en que la comunidad internacional encabezada por Hugo Chávez y Nicolas Sarkozy que durante todo este tiempo han demostrado un "interés inmenso por contribuir a la liberación de los secuestrados" asuma esta tarea y entienda que es un "llamamiento de angustia y de unidad".