BOGOTÁ, 10 Ene. (EUROPA PRESS) -
Aunque José Crisanto Gómez permanece junto a su núcleo familiar en el Programa de Protección de Testigos, la Fiscalía colombiana no descarta que la guerrilla le entregase a otros niños para que permanecieran bajo su cuidado.
Los niños podrían ser hijos de padres o madres guerrilleros. Las autoridades colombianos, por ello, buscan descartar que los menores, que tienen entre 7 y 11 años, hayan sido secuestrados por la guerrilla, informó hoy el diario 'El Tiempo'.
Fuentes oficiales confirmaron que en los laboratorios del CTI y del Instituto de Medicina Legal de Colombia se realizarán pruebas de ADN que serán cotejadas con las de Gómez. Si estas revelan que alguno de los niños no es su hijo, Crisanto podría perder la paternidad y los niños quedarían bajo la protección del ICBF, que aún tiene bajo su custodia a Emmanuel.
La Fiscalía también inició una indagación para determinar si Gómez formaba parte de alguna célula de las FARC, caso en el cual también se evaluaría su continuidad en el Programa de Protección. Hasta ahora, el hombre ha admitido que conocía a los guerrilleros que se movían por la zona del Guaviare en la que vivía, pero ha negado cualquier relación con el grupo armado.
Las autoridades también investigan quiénes están detrás de las amenazas que en las dos últimas semanas han tenido como blanco a José Crisanto Gómez y a algunos de sus allegados.