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BOGOTÁ, 17 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, se ha reunido este lunes en la Casa de Nariño --sede del Gobierno del país-- con el procurador general, Alejandro Ordóñez, y el fiscal general, Eduardo Montealegre, de forma independiente, para abordar la situación generada por la destitución e inhabilitación por 15 años del alcalde de Bogotá, Gustavo Petro.
En este sentido, Santos ha advertido a los funcionarios de que hará respetar la institucionalidad y el orden jurídico. Asimismo, ha insistido en que Bogotá "no está a la deriva", sino que está "más presente que nunca" en su trabajo diario como Presidente, según ha informado la emisora colombiana Caracol Radio.
El mandatario tiene pendiente reunirse este martes con el propio alcalde mayor de la capital. Santos se ha mostrado "confiado" en que la situación se superará pronto y ha vuelto a apelar a las vías institucionales como medio para dar fin a la actual situación.
PETRO ACUDE ESTE MIÉRCOLES AL CIDH
Petro afirmó el pasado viernes, ante miles de manifestantes que se reunieron en la Plaza de Bolívar, que la única persona que puede destituirle de su puesto es Santos y anunció que el próximo miércoles se reunirá con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
"El miércoles la máxima instancia de la justicia de América podrá escucharme y comenzará su reflexión para tomar una decisión", dijo el mandatario en la sede del gobierno local, donde confluyeron las marchas de apoyo, que rechazan la decisión de la Procuraduría de destituir e inhabilitar a Petro durante 15 años.
"No hay escape posible ni la Constitución, ni la ley, ni ninguna norma escrita dice que el alcalde mayor de la ciudad de Bogotá será destituido por el procurador", concluyó.