Actualizado 03/05/2014 23:48

Ya son 7 los muertos por el derrumbe de una mina ilegal

Mina derrumbada en Colombia
Foto: REUTERS

BOGOTÁ, 3 May. (EUROPA PRESS) -

   El número de mineros que han muerto a causa del derrumbe que se produjo el pasado miércoles en una explotación ilegal de oro ubicada en el municipio de Santander de Quilichao, en el departamento de Cauca, suroeste de Colombia, ha ascendido a siete.

   "En la jornada de este sábado hemos logrado llegar a cuatro cuerpos y recuperarlos. Se trata de dos hombres y dos mujeres, pero su identidad ha aún no ha sido determinada", ha dicho el comandante del Cuerpo de Bomberos de Santander de Qulichao, Víctor Claros.

   Estos cuatro cadáveres se suman a los tres que los servicios de emergencias ya rescataron del yacimiento aurífero el pasado miércoles. Tras ello, quedaría localizar a los nueve mineros que aún siguen desaparecidos, según ha informado el diario colombiano 'El Tiempo'.

   En este contexto, el alcalde de Santander de Quilichao, Luis Eduardo Grijalba, ha declarado el estado de calamidad pública en la zona porque "permitirá al Gobierno municipal hacer los gastos necesarios para atender la emergencia".

   El comandante del Batallón de Ingenieros de Atención y Prevención de Desastres Naturales del Ejército, el coronel Jesús Alberto Gómez, ha detallado que hasta el lugar se han desplazado unos 400 efectivos y 15 máquinas para localizar y rescatar a los mineros.

INTENTOS DE CIERRE

   En este contexto, el gobernador de Cauca, Temístocles Ortega, ha exigido al Gobierno que clarifique la legislación sobre minas, indicando que las autoridades regionales han intentado cerrar las explotaciones ilegales en varias ocasiones, pero sin éxito.

   El primer intento se produjo el pasado 11 de diciembre en la vereda El Palmar, pero unos 800 mineros se enfrentaron a la Policía y al secretario del Gobierno municipal, Ricardo Cifuentes, quien finalmente dejó el cargo por amenazas.

   Dos meses después, en la vereda de San Antonio, donde se ha producido el accidente, decenas de mineros ilegales impidieron que las fuerzas de seguridad se llevaran sus máquinas y clausuraran el yacimiento aurífero.