Zuluaga "tendría muchas dificultades para explicar al mundo que quiere poner fin al proceso de paz"
MADRID, 14 Jun. (Notimérica/EP) -
El analista en conflictos y director del grupo Civis, Guillermo Pérez Florez, no duda en afirmar que "el conflicto colombiano está llegando a su fin" gracias, entre otras cosas, a que las elecciones que se resuelven este domingo han vuelto a situar el tema como uno de los más importantes para los colombianos después de que en los últimos años el problema de la guerrilla haya estado contemplándose, según afirma, con "perversa indiferencia".
"En los centros urbanos el conflicto se vive con perversa indiferencia porque la mayoría de las víctimas son los campesinos, los indígenas, la gente que vive en la periferia", asevera el colombiano, quien afirma que en las elecciones se ha vuelto a hacer visible el conflicto y que "cada vez hay mayor interés en el proceso de paz" y desde esa perspectiva "ya hay un triunfo".
Para el abogado y periodista colombiano no hay manera de que el proceso se revierta porque "hay un giro en la política exterior norteamericana respecto a los conflictos como el de Irak o el de Afganistán" y, además, en el ámbito interno, fuerzas políticas en el país que antes eran opuestas se han acercado en favor de la paz. Las propias Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y la segunda guerrila del país, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) saben que "la posibilidad de un triunfo militar es cero", señala.
Y si pierde el actual presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, el proceso seguirá adelante porque su rival, el 'uribista' Óscar Iván Zuluaga, tendría que pagar "un coste político muy alto" si no continúa con los diálogos que se llevan a cabo en La Habana, señala en una entrevista al portal de Notimérica, editado por Europa Press.
"Estas negociaciones han tenido el apoyo de la OEA, de la ONU, de la Unión Europea, de la Cruz Roja... Una buena cantidad de organismos y de instancias internacionales han visto con muy buenos ojos que Colombia termine con el conflicto armado. Tendría muchas dificultades para explicarlo internacionalmente", dice respecto a Zuluaga, quien ha hecho de la lucha contra los diálogos de paz de Santos la bandera de su campaña y ha llegado a decir que los suspendería temporalmente de llegar a la Casa de Nariño.
"Una cosa es ser candidato y otra es ser presidente. Zuluaga y el 'uribismo' se dedicaron desde el comienzo a boicotear el proceso, a instar al odio, a la polarización... En ese orden de ideas sus votos han crecido con este discurso. En este momento tendría un coste político muy alto cambiar ahora, pero en caso de que gane, ¿cómo explica al mundo que tras llegar a un acuerdo en tres puntos de las negociaciones que ya se acaba?", explica el analista.
UN FINAL PARA UN CONFLICTO ARRASTRADO DESDE LA GUERRA FRÍA
Pérez Florez nos recuerda que podemos estar ante el final de un "conflicto incubado en el marco de la Guerra Fría", aunque tenga "unas raíces políticas, sociales y culturales", ya que la conformación de las FARC en 1964 tuvo lugar "en un escenario donde no había posibilidades de acuerdo entre el sector comunista y el sector capitalista".
El "mito fundacional de las FARC" es "el tema agrario" y por ello es el punto que está sobre la mesa de negociaciones es el más importante para el investigador. Este asunto es uno de los tres puntos de la agenda de cinco que ya se han abordado en La Habana. Se ha recorrido gran parte del camino, aunque haya que esperar para averiguar la "capacidad para desarrollarlo e implementarlo" por parte del Gobierno.
Otro de los temas más importantes para Pérez Florez es la participación política, otro de los puntos que ya ha sido contemplado en las negociaciones. "La democracia colombiana se ufana en ser de las más antiguas, pero para muchos es la dictadura perfecta, porque hay elecciones pero no hay verdadera democracia", indica.
"Hay ejemplos vergonzosos como en los 80 con el intento de paz del Gobierno de (Belisario) Betancur. Con estos acuerdos se lanzó el partido político que se llamaba Unión Patriótica. Este fue literalmente exterminado por sectores de extrema derecha", rememora.
La compraventa de votos, la poca transparencia del sistema electoral, la poca voz que tienen algunos sectores, son sólo algunos de los problemas de la democracia colombiana, pero hay algo que también será un tema a resolver en el futuro: la memoria histórica y el reconocimiento de las víctimas.
"Un conflicto sólo se podrá superar cuando se pueda hablar de él sin reabrir heridas. Hay que diferenciar entre la finalización del conflicto militar y la reconciliación. Esta última llevará más tiempo", afirma.
LOS NUEVOS HORIZONTES DE COLOMBIA ANTE LA PAZ
Alcanzar la paz acarrearía múltiples ventajas a los colombianos, según el analista. Para empezar, se estipula que el país pueda apuntarse "dos puntos" en el aumento de su PIB. Colombia "crece al 4 y podría crecer al 6", señala.
Pero lo que es más importante para el experto es que se podría "desactivar el circuito de la violencia" ya que la violencia política ha creado "una subcultura en el conjunto de la sociedad".
Según el experto, los colombianos tienden a solucionar los problemas cotidianos de manera violenta, lo cual ha costado muchas pérdidas humanas a lo largo de los años. Colombia tiene actualmente una tasa de 34 homicidios por cada 100.000 habitantes, lo que ubica al país entre los que tienen más muertes violentas a nivel mundial.
Un efecto muy ventajoso para Colombia, según Pérez Florez, sería que por fin el país dejaría de ser "monotemático" para siempre. "A tres generaciones en los últimos 30 años sólo les hemos hablado del conflicto armado y del narcotráfico", indica.
"Colombia tiene potencialidades y creatividad, ganas de vivir. El pueblo es amable, cálido. En nuestro país no sufrimos de xenofobia, si no de 'xenofilia'", señala el profesor, que insiste en que su país es "hermoso" también en cuanto a sus paisajes.
Además, asegura que "Colombia es la pieza que falta en el puzzle sudamericano" y el gran problema para su integración "ha sido el conflicto". El presidente de Ecuador, Rafael Correa, llegó a decir que Ecuador "limitaba al norte con las FARC". Pero de llegar a la paz, Colombia afianzaría su posición como uno de los líderes de la Alianza Pacífico. Es sólo uno de muchos ejemplos.
EL DÍA DE LAS URNAS, UN DÍA DETERMINANTE
Para Pérez Florez, este domingo será un día clave para entender a la sociedad colombiana, una sociedad que casi no se ha dejado ver ante las urnas, ya que "un 60 por ciento de los electores" no acudieron a votar en la primera vuelta.
Esta "mayoría silenciosa", tal y como define el analista, se complementará con otro factor importante para entender el pensamiento del ciudadano colombiano, la ideología predomintante. "Un líder conservador decía que el país era asustadoramente conservador, pero que tenía la costumbre de votar por liberales. Realmente si uno mira la historia de Colombia es así", asevera Pérez Florez.
En la jornada electoral veremos "si en efecto es un país conservador que le tiene miedo al cambio o quiere romper y abrirse a la diferencia", apunta el profesor, que se atreve a señalar: "Yo creo que Santos va a terminar imponiéndose porque ha hecho un ejercicio que no se había hecho nunca. Santos, haciendo de la necesidad virtud, ha logrado implementar un diálogo político inédito en Colombia".
"Ha sido capaz de hablar con el señor 'Timochenko' (FARC), el señor 'Gabino' (ELN), pero simultáneamente con el banquero (Luis Carlos) Sarmiento, con liberales, con verdes, con conservadores, con el pueblo... Algo muy difícil de lograr, que no se corresponde con la tradición colombiana", destaca el analista.
En este sentido, "Zuluaga se quedó hablando con los de la misma tribu", pero aunque el 'uribista' ganara, insiste, sería incapaz de explicarle al mundo que quiere romper con un proceso de paz que se antoja el definitivo.