BRASILIA, 6 Ago. (EUROPA PRESS) -
Un total de 40 personas, de diferentes etnias indígenas y estudiantes, han vuelto a ocupar el Museo del Indio, cercano al complejo deportivo del Estadio de Maracaná, después de que en marzo fueran desalojadas a la fuerza por la Policía Militar de Río de Janeiro debido a las intenciones de la ciudad de ampliar el recinto deportivo en detrimento de este recinto cultural.
Con motivo de la próxima Copa del Mundo de 2014 y los Juegos Olímpicos de 2016, el gobernador de Río, Sergio Cabral, había propuesto la demolición del Museo del Indio para ampliar el aparcamiento del estadio de fútbol de Maracana.
Tras varias protestas y disputas judiciales, desistió de este empeño pero no de la desocupación, pues el recinto, además de centro cultural de este sector de la población brasileña, también servía como residencia para un grupo de indios desde 2006, según ha informado el diario brasileño 'Folha de Sao Paulo'.
Durante la desalojo que tuvo lugar en marzo de 2013 se produjeron fuertes enfrentamientos con la Policía Militar, que respondió con balas de goma y gases lacrimógenos y de pimienta a la negativa de los indios a abandonar el lugar. En esta ocasión, y hasta el momento, no se han producido enfrentamientos con los cuerpos policiales, los cuales se han situado a las puertas del recinto para impedir que la ocupación vaya más allá.
Los indígenas, acompañados por varios estudiantes, han reivindicado que el Museo del Indio siga siendo un centro de estudios de la cultura de los nativos de Brasil y por ello han pedido reunirse con la ministra de Cultura, Adriana Rattes.