CALI, 22 Feb. (Colprensa/Notimérica) -
"Una gran dosis de tenacidad, locura y de pasión por lo que hago". Esa es, según Mario Fernando Prado, la fórmula para mantenerse al aire, durante 15 años, con su programa 'Mario Fernando Piano', que se emite todos los miércoles a las 8.00 pm (hora local), por Telepacífico.
La fecha exacta del primer programa no la recuerda, pero está cerca de las 800 emisiones. "Con enormes satisfacciones y con toda suerte de entrevistados", dice Prado, conocido también en Cali por su columna de opinión 'Sirirí' y por liderar el programa radial 'Oye Cali'.
La idea de hacer un programa de televisión se la dio Alfonso Córdoba. Su amigo, el publicista Carlos Duque, añadió: "Usted solo sirve para tocar piano" y una charla informal con Noemí Sanín, al son del piano, en casa de Elsa Dorronsoro, hizo que la idea del programa se cristalizara. Ahí empezó la aventura de la TV y para ello necesitaba un productor, y llamó a Carlos Mayolo.
El primer programa fue con Helenita Vargas. "Ahí le pregunté si había sido novia de Alfonso López y ella me contestó 'Que piensen lo que quieran'", cuenta.
Poner en marcha el programa de televisión "fue una tragedia porque la noche anterior de la grabación yo no dormía y amanecía con daño de estómago, una especie de pánico escénico. Además, hacía unos libretos muy grandes, con los que me estaba enloqueciendo".
"Llamé a José Gabriel Ortiz y le pedí consejo. Coincidimos en un almuerzo con 'Pacheco' y él me dijo: Sea usted, como es en la realidad. Y así he realizado 770 y pico de programas".
MARIO 'LLORANDO' PIANO
Prado asegura que la música en su programa "es un aderezo que se pone para mostrar que toda persona tiene una canción. Yo me averiguo cuáles son esos temas importantes para cada uno y les doy en la yugular", admite.
"A muchos los he puesto a llorar y hasta en una época dijeron que mi programa debía llamarse 'Mario llorando piano'. ¡Hasta yo he llorado!", reconoce el periodista.
En su lista de lloradas memorables está la de Gonzalo Gallo, en uno de los primeros programas; o la de Noemí Sanín, que nunca salió al aire. "Le toqué un bolero y ella se descontroló. Pero ese día se dañó la grabación y en la repetición, la reacción no fue la misma".
En la lista también cuenta al investigado General Castañeda, quien se puso sentimental al escuchar una melodía que le recordaba a su mamá; y a María Clara Domínguez, la directora de la Fundación Zoológico de Cali, "le tuvimos que dar unos minutos para que se sintiera mejor luego de escuchar 'Mi viejo'. La música es el arma letal que yo tengo con el invitado".
LAS MEJORES ANÉCDOTAS
En 15 años de programa se han cocinado todo tipo de anécdotas. Una memorable, con Jaime R. Echavarría. Por este programa ganó el Premio Nacional de Periodismo como mejor entrevista de la televisión colombiana, en 2000.
"Llegó puntual pero el set no estaba listo. Me pidió un trago, le mandé a comprar una caneca de aguardiente y se tomó unos tragos. Acordamos intercalarnos, él una canción y yo otra, pero me desplazó y me tocó metérmele en cada canción y acompañarlo".
También a su memoria viene el recuerdo de seres anónimos como 'Barranquilla', un "embellecedor de calzado" que trabajaba en el centro de Cali; o de Geraldine, una dama de compañía que contó sus aventuras y para rematar se desnudó. "Esa entrevista me causó problemas con la Curia porque unas señoras pidieron mi cabeza".
O el enredo con la Fiscalía, "por insistir en una gestión periodística para poder entrevistar a Carlos Castaño. Mi nombre terminó metido en un rollo".
Y con mucha confianza Mario Fernando dice que bien podría hacer un programa diario porque "toda la gente tiene cosas por contar".