MÉXICO DF, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
Más de 100.000 personas participarán de las distintas actividades organizadas con motivo de la XXV Feria del Libro de Antropología e Historia, que se inaugura este jueves, 26 de septiembre, en el Museo Nacional.
Del 26 de septiembre al 6 de octubre, 67 editoriales se darán cita en el Museo Nacional de Antropología para celebrar con los lectores 25 años de feria.
Se trata de un encuentro con lo mejor del mundo editorial dedicado a estos temas y un punto de reunión y de reflexión entre especialistas y públicos diversos, de ahí que este año se desarrolle bajo el lema 'Pensar la comunidad, reconstruir el tejido social'.
César Moheno, secretario técnico del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) dio a conocer el amplio programa que se desarrollará del 26 de septiembre al 6 de octubre, en el marco de este primer cuarto de siglo de la Feria, una actividad que nació justamente en el 50 aniversario de esta institución con el ánimo de construir "una comunidad de lectores intérpretes, porque cada mirada le da a nuestro patrimonio una vida nueva".
A un año de conmemorar sus primeros 75 años como institución, Moheno destacó la labor editorial realizada por el INAH durante este periodo, de manera que bajo su sello han sido publicados alrededor de 2.500 títulos y han encontrado voz cerca de 1.500 autores. A este trabajo se suma la organización de este encuentro librero considerado el más importante en su género en Iberoamérica.
Como es tradición, el Museo Nacional de Antropología comparte sus espacios para propiciar la convivencia a través de la palabra, la imagen, la danza y la música. Los asistentes conocerán la oferta de 67 casas editoriales que exhibirán su producción en 108 stands, además habrá conciertos, cine y exposiciones fotográficas.
En palabras de César Moheno, en una institución como el INAH, "la relación con las manifestaciones del patrimonio sólo se completa cuando se encuentra una mirada, cuando la curiosidad de un estudioso, de una académica, de un viejo, de un niño, se posa en este patrimonio, cuando un lector, por el acto de querer conocerlas, las convierte en patrimonio cultural", resaltó.