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Por Jörn Poltz y Keith Weir
MUNICH, Alemania, 16 ene, 16 Ene. (Reuters/EP) -
- El jefe comercial de la Fórmula Uno, Bernie Ecclestone, será sometido a juicio en Múnich por supuestos sobornos en la venta de una participación en el negocio, lo que lo obligará a aflojar su férreo control sobre el deporte.
La empresa Formula One, dueña de los derechos comerciales de la categoría, dijo que Ecclestone podría seguir a cargo del funcionamiento diario del negocio, que tiene una facturación anual de alrededor de 1.500 millones de dólares, pero que dimitió como director de la compañía a la espera del resultado del juicio.
Ecclestone, de 83 años, fue acusado en julio de sobornar al ex banquero alemán Gerhard Gribkowsky durante el proceso de venta de una participación en la empresa Formula One a la firma de capital privado CVC hace ocho años.
"Bajo la planificación actual, el juicio principal debería comenzar a fines de abril", dijo el jueves en un comunicado un tribunal de Múnich.
Si es declarado culpable, Ecclestone podría ser condenado a hasta 10 años de cárcel.
Ecclestone también enfrentará una supervisión más estricta en el consejo de Formula One, que incluye a reconocidos empresarios como el presidente de Nestlé, Peter Brabeck, y el director ejecutivo de la firma de publicidad WPP, Martin Sorrell.
"La aprobación y firma de contratos importantes y otros acuerdos comerciales serán ahora responsabilidad del presidente Peter Brabeck y del vicepresidente Donald Mackenzie", dijo la empresa en un comunicado.
Ecclestone ha negado haber actuado mal y dijo que luchará para limpiar su nombre.
"El señor Ecclestone ha asegurado al consejo que es inocente de los cargos y que tiene la intención de defenderse vigorosamente del caso", agregó el comunicado de la compañía.
Mackenzie, cofundador de CVC, había dicho previamente que Ecclestone podría ser despedido si es encontrado culpable de alguna conducta inapropiada.
CVC sigue siendo el mayor accionista de Formula One, con una participación de alrededor del 35 por ciento en la compañía poseedora de los derechos de la categoría.
El caso podría suponer un importante retraso en los planes de sacar a bolsa a la F1 en Singapur y revivirá las especulaciones sobre un eventual sucesor del hombre que convirtió la máxima categoría del automovilismo mundial en un gran negocio.