Actualizado 11/01/2010 15:51

Angola dice arrestó a dos atacantes selección Togo

Por Julien Pretot

CABINDA, Angola (Reuters/EP) - Autoridades angoleñas han arrestado a dos personas por sospechas de haber participado de un ataque contra un autobús que transportaba a la selección de fútbol de Togo hacia la Copa Africana de Naciones y en el que murieron dos integrantes de la delegación.

El procurador provincial Antonio Nito dijo en un comunicado que las dos personas pertenecían al Frente para la Liberación del Enclave de Cabinda (FLEC por sus siglas en inglés), que ha estado luchando por la independencia de esa región de Angola desde hace más de 30 años.

El FLEC se atribuyó la responsabilidad por el ataque del viernes, el cual tuvo lugar poco después de que el autobús que trasladaba a la delegación togolesa atravesara la República Democrática del Congo.

"Los dos elementos del FLEC fueron capturados en el escenario del incidente, en la ruta a Massabi que conecta a ambos países (Angola y Congo)", explicó el funcionario en un comunicado publicado por la agencia estatal de noticias de Angop.

El autobús de Togo fue emboscado por pistoleros en la región de Cabinda, que está geográficamente separada del resto de Angola. Los insurgentes desataron una lluvia de balas sobre el autobús durante varios minutos, de acuerdo a algunos jugadores togoleses.

El equipo de Togo retornó a su país el domingo junto con los cuerpos del técnico asistente y el oficial de prensa para comenzar tres días de duelo.

No obstante, el ministro de Deportes de esa nación dijo que aún esperaba que la selección nacional pudiera unirse a la Copa Africana de Naciones, el torneo más importante del continente.

El conductor del autobús también fue asesinado y el arquero togolés Kodjovi Obilale se encontraba en estado estable en un hospital en Johannesburgo, Sudáfrica, luego de haber sido operado tras recibir serias heridas de bala, según informaron médicos.

MAS ATAQUES

El ataque avergonzó al Gobierno angoleño, que había declarado muerto al FLEC e invirtió 1.000 millones de dólares en los preparativos para la Copa Africana, con el objetivo de mostrar una recuperación gradual tras décadas de una guerra civil que recién finalizó en el 2002.

Expertos dicen que el FLEC está dividido en facciones y tal vez reuna unos 200 integrantes, la mayoría confinados a la remota región norteña de Cabinda.

De todas maneras, sus líderes, con base en Francia, han prometido más ataques, por lo que Angola ha incrementado las medidas de seguridad.

Rodríguez Mingas, secretario general del FLEC, indicó que el ataque al autobús de Togo no estaba dirigido a los futbolistas del equipo sino a las fuerzas angoleñas que encabezaban la caravana de vehículos.

"Entonces había posibilidades de que los disparos hirieran a jugadores", declaró Rodríguez Mingas al canal de televisión francés France 24.

"No tenemos nada con los togoleses y damos nuestras condolencias a las familias africanas y al gobierno de Togo", agregó.

Jugadores de Togo dijeron que los rebeldes iniciaron un tiroteo contra ellos durante 15 minutos o más, aunque los hechos continúan siendo confusos.

Cabinda suministra la mitad de la producción de petróleo de Angola, un rival de Nigeria en esa rama comercial, y el grupo estadounidense Human Rights Watch acusó el año pasado al primer país de encarcelamiento ilegal y torturas contra aquellos sospechosos de fomentar separatismo.