Publicado 12/05/2018 18:01

El ecuatoriano Carapaz se impone en la cima de Montevergine di Mercogliano

Richard Carapaz octava etapa Giro Italia
GIRO D'ITALIA

MADRID, 12 May. (EUROPA PRESS) -

El ciclista ecuatoriano Richard Carapaz (Movistar Team) ha conseguido este sábado el triunfo en la octava etapa del Giro de Italia, disputada sobre 209 kilómetros entre las localidades de Praia a Mare y Montevergine di Mercogliano, al imponerse en solitario en la llegada final en alto mientras que el británico Simon Yates (Mitchelton-SCOTT) ha conservado su liderato de la general.

A falta de un kilómetro y medio para llegar a la meta, Carapaz dio el estirón oportuno para alcanzar al neerlandés Koen Bouwman (LottoNL-Jumbo), quien había sido uno de los protagonistas de la fuga del día y que a punto estuvo de culminar con victoria la subida a este puerto de montaña de segunda categoría.

Pero Bouwman finalmente no logró ese objetivo, se vio superado 'in extremis' por el ecuatoriano y entró en meta junto al grueso del pelotón, a siete segundos de un Carapaz que brindó de esta forma el primer triunfo de etapa para un equipo español en la presente 101ª edición del Giro.

La buena actuación de Carapaz le sirvió además para situarse entre los diez primeros de la general, que sigue encabezada por Yates después de una jornada sin sobresaltos en la ristra de favoritos. Los Tom Dumoulin, Jhoan Esteban Chaves, Chris Froome y compañía vivieron este sábado los primeros intentos de fuga nada más empezar el recorrido, pero el equipo Quick-Step controló el endiablado ritmo.

UNA FUGA POCO NUMEROSA
A 165 kilómetros de meta, una decena de corredores formaron la escapada buena. El citado Bouwman, Matej Mohoric (Bahrain), Matteo Montaguti (AG2R), Jan Polanc (UAE), Rodolfo Torres (Androni), Davide Villella (Astana) y Tosh Van der Sande (Lotto) fueron finalmente quienes rubricaron tal fuga para aventajar en hasta seis minutos y 15 segundos al pelotón.

Pero el Mitchelton-SCOTT, equipo del líder Yates, empezó a tirar con fuerza en su persecución. Sin apenas novedades en el siguiente centenar de kilómetros, a 26 de meta los demás equipos se unieron al Mitchelton para reducir las diferencias de cronómetro a la vez que empezaba a llover con fuerza en la región de la Campania.

El santuario de Montevergine, a lo largo de 17,1 kilómetros al 5 % de desnivel medio, y con rampas a un máximo del 10 %, apareció como exigente segundo final en alto de montaña en lo que se lleva disputado del Giro. A 3,7 km del final, Bouwman lo intentó sobre el asfalto mojado aunque fue Carapaz quien terminó uniendo su nombre a los de Armand Desmet (1962), Danilo di Luca (2001 y 2007), Damiano Cunego (2004) y Bart De Clercq (2011) como vencedor en dicha cima.

El Giro continuará este domingo con la disputa de su novena etapa, entre las localidades de Pesco Sannita y Gran Sasso D'Italia (Campo Imperatore), sobre un recorrido de 225 kilómetros y que supondrá la tercera llegada cuesta arriba, con un pico máximo del 13 % de pendiente.