BUENOS AIRES (Reuters/EP) - El director técnico Claudio Borghi anunció el miércoles su alejamiento de Boca Juniors, un día después de la derrota 1-0 ante River Plate en el clásico del fútbol argentino y aclaró que no recibió ofertas ni tiene planes para dirigir la selección de Chile.
Borghi, que asumió en mayo en el popular club, sumó el miércoles su séptima derrota en el torneo Apertura, donde ocupa la décimoquinta posición con apenas 17 puntos de 42 posibles.
"Hemos tomado la decisión de no ser más el cuerpo técnico de Boca, hoy solamente vine por una cuestión de respeto y agradecimiento al club", dijo Borghi en conferencia de prensa.
"Los resultados no han sido los que esperábamos todos, jugadores, dirigentes, hinchas cuerpo técnico, son más cosas malas que buenas, en lo deportivo", agregó.
Boca dejaría a Roberto Pompei como interino mientras resuelve al reemplazante de Borghi, y los nombres que manejan los medios son el del actual entrenador de Banfield, Julio César Falcioni, y el ex jugador del club Blas Giunta.
El técnico aprovechó su contacto con la prensa para desmentir de forma categórica las versiones de peleas con el arquero Cristian Luchetti y el delantero Lucas Viatri.
"Una persona de muy mala leche (dañina) de verdad dijo que yo casi me voy a las manos con Viatri. Es un mentiroso y ojalá lo pague con su salud, esas cosas no se dicen", expresó.
"De los jugadores no tengo quejas, han estado siempre disponibles porque son profesionales a los que le sale bien el trabajo y a veces no", señaló.
Borghi también se refirió a la trascendencia que toma el trabajo diario en un club como Boca.
"Desmentir todos los días es bravo. Boca es como hacer el sexo con la ventaja abierta, no tenés intimidad", ironizó el entrenador.
Borghi, quien dirigió en Chile y ganó cuatro títulos locales con el Colo Colo, dijo que no está en sus planes dirigir a la selección de ese país en lugar del renunciante Marcelo Bielsa.
"No he recibido ninguna comunicación ni la voy a recibir", destacó Borghi.
Fiel a su estilo jocoso, Borghi le pidió a los periodistas que dejen de llamarlo por teléfono ahora que se va de Boca.
"Un mensaje muchachos: no me llamen más, no tengo el celular. Es de Boca y lo tuve que devolver", señaló.