LONDRES (Reuters/EP) - Steven Gerrard, capitán del Liverpool de la Liga Premier del fútbol inglés y quién está acusado de atacar a un empresario en un bar, dijo el jueves en un tribunal que efectivamente lo había golpeado, pero que actuó en legítima defensa y que no había perdido el control.
El mediocampista inglés de 29 años testificó ante un tribunal de Liverpool, donde fue enjuiciado por participar en una reyerta.
El empresario Marcus McGee, de 34 años, dijo en el tribunal que se enfrentó a una "descarga" de golpes de Gerrard cuando se negó a entregar el control de un reproductor de CD.
McGee, que estuvo a cargo de la música esa noche en el Bar Lounge de Southport, en las afueras de Liverpool, perdió un diente delantero en la pelea, producida en las primeras horas del 29 de diciembre de 2008, cuando Gerrard celebraba la victoria 5-1 sobre el Newcastle United.
El jurado también escuchó que Gerrard estimaba que se encontraba en un nivel de embriaguez de siete, en una escala de 10, pero agregó que no había perdido el control, informó la Press Association.
"Yo sabía que sin duda había bebido", dijo Gerrard, quien añadió que como un jugador conocido se había acostumbrado a que la gente se le acercara cuando hacía compras o en bares y restaurantes.
"A veces me apoyan (...) pero algunos comentarios son despectivos (...) Por lo tanto, trato de lidiar con esto de la mejor manera que puedo", agregó.
La noche de la pelea, Gerrard dijo que tenía la autorización del administrador del bar para ayudar a elegir la música, pero McGee le "arrebató" el control y lo insultó.
El jugador narró ante tribunal que regresó donde sus amigos, pero que McGee se había sentado en un taburete del bar mirándolo, por lo que fue a hablar con el empresario nuevamente.
"No podía entender por qué el hombre tenía un problema conmigo, por qué era tan agresivo (...) Quería ver por qué tenía problemas conmigo", comentó.
Gerrard dijo que en ese momento tuvieron una acalorada discusión y se profirieron una gran cantidad de insultos.
"Estuvimos discutiendo y le dije a la policía que sentí que Marcus iba a atacarme y por eso lo golpeé (...) Yo estaba firmemente convencido de que Marcus venía hacia a mí para golpearme", agregó.
El juicio continuará.