Por Iain Rogers
MADRID, 9 ene, 9 Ene. (Reuters/EP) -
- El Atlético de Madrid podrá desterrar cualquier duda sobre sus credenciales al título cuando reciba al Barcelona el sábado, pero tendrá que someterse al resurgimiento de Lionel Messi para vencer a los actuales campeones.
Han pasado casi 20 años desde la última vez que el segundo equipo de la capital española demostró ser un firme candidato al título de Liga, mientras que el Real Madrid y el Barcelona, los dos clubes con más ingresos, han compartido el botín con breves ráfagas de éxito del Valencia y el Deportivo de la Coruña.
El tercer puesto logrado la temporada pasada es el mejor resultado desde que el Atlético consiguió el doblete en 1996, e incluso pasó dos temporadas en la Segunda División al comienzo del milenio.
El actual entrenador Diego Simeone, ex centrocampista internacional con Argentina y miembro del equipo de 1996, ha revivido aquellos días de gloria desde que se hizo cargo del Atlético al final de 2011, perfeccionando una defensa agresiva y sacando lo mejor de jugadores como el delantero Diego Costa y el mediocampista Koke.
Los campeones de la Copa del Rey del año pasado han ganado todos sus partidos en el estadio Calderón a excepción del primer encuentro de la Supercopa contra el Barcelona en agosto, cuando empataron 1-1.
Una victoria este sábado les colocaría tres puntos por encima del equipo catalán a mitad de temporada, mientras que su rival madrileño, el Real Madrid, está cinco unidades por debajo en el tercer puesto y se enfrenta al Espanyol el domingo.
Sin embargo, ganar al Barça para liderar la tabla en el ecuador de la temporada será una simple "anécdota" ya que lo importante es estar jugando bien hasta el final de la temporada en mayo, advirtió el miércoles Koke, seleccionado por Del Bosque por primera vez el año pasado.
"Da igual que ganes este encuentro si al final no cumples con los objetivos", dijo en un rueda de prensa que coincidía con su 22 cumpleaños.
SIN DOLOR
Una persona que hará lo posible por frustrar las ambiciones del Atlético será el Balón de Oro Lionel Messi.
El delantero argentino marcó el miércoles un doblete en su regreso tras una lesión en la victoria por 4-0 del Barcelona en el primer partido de los octavos de final de la Copa del Rey en casa frente al Getafe.
Messi recibió una emocionante ovación por parte los seguidores locales cuando sustituyó a Andrés Iniesta en el minuto 64 en el Camp Nou, la primera aparición del argentino desde su lesión muscular en noviembre.
La lesión es la última de una serie de problemas que le afectaron en el 2013, pero afirma estar "libre de dolor" y lleno de deseos de ayudar al Barça en su objetivos de Liga, Copa y Liga de Campeones.
"Tengo la ilusión de siempre", le dijo a Barça TV tras el partido del Getafe, y añadió que consultaría con su entrenador Gerardo Martino y el médico del club para decidir si puede ser titular frente al Atlético de Madrid.
"Antes me había acostumbrado a jugar con dolor y hoy, más allá de los goles, me he encontrado muy bien físicamente", dijo el delantero de 26 años.
El Madrid juega en casa el jueves frente al Osasuna en el primer partido de octavos de la Copa antes de viajar a Barcelona para encarar al Espanyol el domingo.
El lunes, el Villarreal, en sexto puesto, enfrentará a la Real Sociedad, en quinto, ambos contendientes para plazas europeas.
(Información de Iain Rogers; Traducido por Francisco Pazos en Madrid)