SANTA FE (Reuters/EP) - La final de la Copa América de fútbol se jugará en el estadio de River Plate, confirmó el miércoles la organización, dejando de lado los temores de que los destrozos causados por hinchas tras el descenso del popular equipo a segunda división impidieran su normal desarrollo.
La Comisión de Infraestructura del comité organizador y dirigentes de la CONMEBOL inspeccionaron el estadio para ver el estado de las obras tras los destrozos en el partido jugado el 26 de junio.
"Vamos a llegar con lo justo pero vamos a llegar", dijo el presidente del comité organizador, José Luis Meiszner.
Según el dirigente, las autoridades de River se comprometieron a dejar en condiciones el estadio para el 24 de julio.
"El tema nos tenía preocupados. La sola posibilidad de pensar en una mudanza de escenario hubiera sido patético", destacó Meiszner.
Los destrozos incluyen unas 4.000 butacas arrancadas de sus tribunas, reposición de vidrios y palcos del estadio.
El traslado de la sede de la final era un serio problema para los organizadores, ya que el estadio de River es el que cuenta con más capacidad y la infraestructura para la ceremonia de clausura estaba diseñada para este escenario.