Actualizado 06/06/2010 22:18

MUNDIAL-Amor por Messi hermana a aficiones Argentina y Sudáfrica

Por Enrique Andrés Pretel

PRETORIA (Reuters/EP) - La admiración por el futbolista Lionel Messi hermanó el domingo a las aficiones argentina y sudafricana, que cantaron y bailaron juntos durante una práctica abierta al público para animar al conjunto que dirige Diego Armando Maradona.

Miles de hinchas sureños y africanos se dieron cita en el campo de prácticas de la Universidad de Pretoria, a las afueras de la capital sudafricana, para ver a las estrellas con las que Argentina espera volver a conquistar una Copa del Mundo, 24 años después de que Maradona levantara como jugador el trofeo más prestigioso del fútbol internacional.

"¡Volveremos, volveremos, volveremos otra vez, volveremos a ser campeones, como en el 86!", gritó enardecida la fanaticada argentina, enfundados en camisetas del combinado albiceleste y agitando banderas nacionales aún cuando los jugadores todavía no habían saltado al césped.

Entre los espectadores destacó la presencia de cientos de escolares sudafricanos, invitados por la Embajada Argentina en Sudáfrica, que ven al joven delantero del Barcelona como su favorito entre los seleccionados latinoamericanos que acuden al primer mundial que se celebra en suelo africano.

"¡We want Messi, we want Messi! (Queremos a Messi)", irrumpieron los escolares sudafricanos con inusitado entusiasmo, haciendo acallar a los visitantes con sus estridentes trompetas vuvuzelas, quienes finalmente rompieron en aplausos para celebrar el ardor de los niños.

En las gradas de cemento se respiraba ambiente festivo, con camisetas albicelestes entremezcladas con las amarillas sudafricanas, mientras fanáticos de ambas hinchadas posaban juntos ante los centenares de periodistas acreditados para la primera práctica con espectadores de los pupilos de Maradona.

COMO CANTARLE A MARADONA

Si en algo diferían los aficionados de ambos lados del Atlántico es en quién es la verdadera estrella del equipo.

"El 10, por supuesto", clamó Diego Cesarini, en referencia al ahora seleccionador argentino, considerado por muchos en su país un "Dios del fútbol" pese a las críticas que recibió su polémica dirección técnica durante la fase clasificatoria hacia el mundial sudafricano.

Muchos de los sudamericanos mostraban con orgullo las camisetas con el nombre de Maradona y su mítico 10 a la espalda, incluso algunas con la imagen del malogrado ídolo en el mundial de Estados Unidos, cuando fue expulsado de la competición por dar positivo en un control antidopaje.

Curiosamente, el astro argentino, considerado uno de los mejores delanteros de la historia del fútbol, jugó su último encuentro ante Nigeria en la Copa de 1994, el mismo equipo ante el que debutará como entrenador en un Mundial el 12 de junio por el grupo B, integrado también por Corea del Sur y Grecia.

"Para los que vivimos el Mundial del 86 (que ganó la Argentina liderada por Maradona), no hay duda posible. El Diego lo es todo para nosotros", agregó Cesarini, un empleado de correos de 37 años que gastó todos sus ahorros y tiempo de vacaciones para seguir a su equipo en el mundial.

Pero no convencían a los chicos sudafricanos, para quienes "la Pulga", como es apodado el delantero estrella de la albiceleste, es sin duda la estrella con más gancho.

"Messi es mi favorito, me gustaría jugar tan bien como él. A Maradona nunca lo vi jugar, aunque me dicen que fue muy bueno", dijo Lgone Gabasiane, un niño de 16 años, vestido con el uniforme de la escuela Saint Alban.

Los veteranos aficionados argentinos solventaron el problema tomándose la molestia de enseñar a los escolares sudafricanos un sencillo canto para ensalzar "al Pelusa".

"Olééééé, olé, olé, olé, Diegoooo, Diegooooo", entonaron cientos de argentinos y sudafricanos, todos juntos, haciendo retumbar la grada con sus saltos.

(Por Enrique Andrés Pretel, editado por Marion Giraldo)