Actualizado 20/06/2014 22:06

MUNDIAL-Fracaso de Inglaterra deja al entrenador Hodgson mirando al futuro

Por Mike Collett-White

SAO PAULO, 20 jun, 20 Jun. (Reuters/EP) -

- El fracaso de Inglaterra en la primera ronda del Mundial, en el que ya no tiene opciones de avanzar cuando le queda un partido por jugar, deja al director técnico Roy Hodgson sin otra opción que poner aún más confianza de la que ha puesto en el talento emergente.

Inglaterra cayó en sus dos primeros partidos, y la victoria del viernes de Costa Rica 1-0 sobre Italia le puso una lápida a las exiguas posibilidades del equipo de clasificar a octavos de final.

A medida que los jugadores eran evaluados tras la derrota de Inglaterra frente a Uruguay en Sao Paulo, quedaba claro que los miembros del equipo de mayor edad eran juzgados como los principales culpables de una derrota que llevó al equipo a casa temprano desde Brasil.

Es cierto que el adolescente Raheem Sterling no pudo repetir ante Uruguay su alentadora presentación en la derrota 2-1 ante Italia cinco días antes, y Danny Welbeck, de 23 años, fue calificado como uno de los de peor desempeño en el Arena Corinthians.

Pero junto a ellos en el muro de la vergüenza se colocaron Leighton Baines, Glen Johnson, Phil Jagielka y Steven Gerrard, que tienen un promedio de edad de casi 31 años.

Es probable que la investigación sobre el fracaso de Inglaterra sea larga y ruidosa, pero ya se está moviendo a favor de dar un mayor énfasis a la juventud, aunque solo sea porque la mezcla de jóvenes y jugadores de mayor edad que salieron al campo en Brasil haya fallado.

Hodgson corrió riesgos. Movió a Wayne Rooney a lo ancho para dar paso a Sterling en el centro contra Italia, y si bien Rooney no jugó bien, el equipo sí lo hizo.

La mayoría de los expertos le instó en poner a Rooney de vuelta en el medio detrás el delantero Daniel Sturridge en el partido contra Uruguay. Rooney jugó bien, anotando su primer gol en la Copa del Mundo, pero el equipo no.

Viendo a Inglaterra intentando quebrar a un duro Uruguay, los reemplazos de Hodgson llegaron tarde en el partido.

El centrocampista del Everton Ross Barkley entró a los 64 minutos para sustituir a un ineficaz Sterling y Adam Lallana reemplazó a Welbeck siete minutos después.

Su incorporación coincidió con una mejora en el juego de Inglaterra que terminó en el gol de Rooney.

Pocos están pidiendo la renuncia de Hodgson pero el técnico se encuentra bajo una creciente presión para sacar a jugadores antiguos, incluso al capitán Gerrard, de 34 años, quien a menudo ha sobresalido jugando para su país.

"Si miles viajan a la otra mitad del mundo y 20 millones ven la televisión en casa, Inglaterra, o el fútbol de Inglaterra, no puede seguir haciéndole esto a su público", escribió Paul Hayward en el diario The Telegraph el viernes.

"(Ellos) se darán por vencidos y volverán a las alegrías de los partidos de club. La revolución de los jóvenes, sin embargo, debe continuar. No hay vuelta atrás", agregó.

El entrenador tiene la oportunidad de hacer esto el martes, cuando Inglaterra enfrente a Costa Rica en su último encuentro en Belo Horizonte.

El partido en sí no tendrá relevancia para el equipo europeo, que ya no puede soñar con el paso a octavos de final. Pero puede ser decisivo para empezar a delinear el futuro después del duro golpe sufrido en Brasil.