Por Martin Petty
PORT ELIZABETH (Reuters/EP) - El técnico de la selección de fútbol de Portugal, Carlos Queiroz, sostuvo que el empate sin goles ante Costa de Marfil no es una vergüenza y que su equipo ya no puede ser precavido si quiere avanzar a la siguiente ronda del Mundial.
Queiroz admitió que su equipo se abstuvo de subir al ataque para evitar caer en la trampa del contragolpe de los "Elefantes", pero dijo que Portugal ya no se podía permitir encerrarse atrás en los dos partidos restantes en el grupo más duro de la Copa del Mundo.
"Este resultado no nos avergüenza. Este es el grupo más duro y sólo dos candidatos pasarán", dijo sobre el Grupo G, que incluye al pentacampeón Brasil, que consiguió con dificultad una victoria 2-1 ante una obstinada Corea del Norte el martes.
"Había preocupación, nerviosismo, normalmente atacamos más. No lo hicimos, fuimos precavidos y equilibrados para evitar que nos contraatacaran", agregó.
Queiroz, que llevó al equipo a semifinales del Mundial 2006, dijo que no tenía nada negativo que decir sobre su equipo, que pareció lento y nervioso.
Portugal se medirá el lunes en Ciudad del Cabo ante Corea del Norte, un equipo muy sólido en defensa y que sale rápido en contragolpe.
"Es importante jugar inteligentemente. Es hora de que Portugal juegue ante un equipo (Corea del Norte) que no es candidato para atacar", dijo.
"Como todos los equipos, debemos poner todas las cartas sobre la mesa. Los jugadores están nerviosos y ansiosos y eso lo hace más difícil. Nuestra ofensiva será completamente diferente en los próximos partidos", agregó.
Pero incluso con un cambio táctico, el ataque podría ser un problema para Portugal, en concreto debido su dependencia del jugador más caro del mundo, Cristiano Ronaldo, que no consiguió marcar en la fase de clasificación, pese a sus exhibiciones con el Real Madrid.
Ronaldo amplió el martes su preocupante sequía goleadora con Portugal con unos pocos destellos de su habitual brillo y se mostró claramente contrariado por la férrea defensa a la que fue sometido y por su propio fracaso a la hora de crear oportunidades.
Otra preocupación en el ataque es la temprana salida de Nani por lesión y el estado del extremo Simao Sabrosa, con una notoria sobrecarga de partidos.
Pero Queiroz dijo que Portugal tenía varias opciones y que no le preocupaba hacer un juego bonito en el denominado "grupo de la muerte" o si avanzaba con lo justo a la siguiente ronda.
"Todo el mundo sabe que sólo dos pueden avanzar, no importa mucho la calidad del fútbol que juegues", indicó.
"Si somos primeros o segundos, no me importa, sólo quiero clasificar", concluyó.
(Información adicional de Steve Keating; Traducido por la Redacción de Madrid)