Por Luis Ampuero
BUENOS AIRES, 12 feb, 12 Feb. (Reuters/EP) -
- El fútbol argentino vivirá desde el fin de semana un polémico torneo con 30 equipos de todo el país, algunos con recursos muy limitados y sin posibilidades de pelear de igual a igual con los más poderosos como Boca Juniors, que acaba de sumar a préstamo al ex delantero del Inter de Italia Daniel Osvaldo.
La presencia por seis meses de Osvaldo, el noveno refuerzo de Boca, le da prestigio al ya cotizado plantel que conduce el técnico Rodolfo Arruabarrena y lo coloca como uno de los grandes candidatos a conquistar la corona, algo que no logra desde la temporada 2011-2012.
Pero las cosas no serán fáciles para Boca, que luchará con su eterno rival River Plate, ganador del primer torneo del 2014, la Copa Sudamericana y la Recopa; Racing Club, el campeón vigente; Independiente y San Lorenzo, que el año pasado conquistó la Copa Libertadores por primera vez en su historia.
El torneo mostrará fuertes diferencias, con equipos prácticamente quebrados y hasta uno que deberá jugar a cientos de kilómetros de sus instalaciones por falta de hinchas.
El campeonato, que quedó conformado tras la insólita decisión de permitir 10 ascensos contra los tres usuales de los torneos anteriores, se presentó oficialmente poco tiempo después del fallecimiento de su ideólogo Julio Grondona, ex presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA).
Pese a que inicialmente los dirigentes defendieron el formato, tras la muerte de Grondona comenzaron a llover las críticas porque achicó el calendario con la Copa Libertadores y los planteles deberán recorrer muchos kilómetros para cumplir con el programa de cada jornada.
"Es un campeonato que no es atractivo, nos va a demandar mucho viaje, mucho desgaste. Cuando nos explicó Julio Grondona que era más televisable, más atractivo, nos convenció", dijo recientemente el presidente de San Lorenzo, Matías Lammens.
"Tenemos que apuntar a normalizar lo antes posible este torneo, como es en el resto del mundo con 20 o 22 equipos".
A las quejas de Lammens también se sumaron las de otros equipos más modestos, como Crucero del Norte de la provincia de Misiones.
Más allá de la preocupación por la falta de dinero para reforzar el plantel y la desigualdad con los más poderosos, el presidente del club dijo que cuando su equipo enfrente a River Plate y a Independiente se mudará a la vecina provincia del Chaco por "falta de hinchas".
"Tenemos de todo, pero nos faltan hinchas. Aquí en Misiones la gente no es muy apasionada por el fútbol pero sin embargo todos preguntan por los partidos con River e Independiente", dijo Koropeski días atrás.
"Vamos a disfrutar lo que estamos viviendo y si llegamos a sobrevivir a la primera división tendremos otro panorama de cara al futuro", expresó.
REFUERZOS PARA SER CANDIDATOS
Varios clubes se reforzaron para vestirse de candidatos al título, como por ejemplo River Plate, que el miércoles logró la Recopa Sudamericana al vencer a San Lorenzo en las finales de ida y vuelta.
Si bien el equipo de Marcelo Gallardo mantuvo el plantel campeón, contrató a dos mediocampistas, el uruguayo Camilo Mayada de Danubio de su país y Gonzalo "Pity" Martínez, de Huracán.
"El fútbol argentino se ve en todo el mundo y jugar en River viene bien porque estamos muy cerca de la Copa América", dijo Mayada, quien espera ser convocado para integrar la selección uruguaya en el torneo que se jugará a mediados de año en Chile.
San Lorenzo reemplazó a seis jugadores transferidos con importantes incorporaciones entre las que se destaca la del defensor Matías Caruzzo procedente de Argentinos Juniors.
"Ahora se viene lo más difícil , mantener lo conseguido y eso lo tenemos bien en claro. Hay que tratar de seguir por ese camino, apoyándonos entre todos por el objetivo", dijo Caruzzo.
Por su parte Racing contrató cinco refuerzos, con el mediocampista Oscar Romero de Cerro Porteño a la cabeza. "Me gustan los desafíos, como la copa Libertadores y el torneo (...) espero estar a la altura de las circunstancias en un club como Racing", dijo Romero.
En tanto Independiente, que busca conseguir un título tras varios fracasos incluyendo un paso por la segunda división, presentó a nueve refuerzos ante 4.000 hinchas en su estadio que vivaron al delantero colombiano José Valencia, hijo de Adolfo "Tren" Valencia.
"Estoy muy satisfecho con lo que se trajo, estamos muy bien para pelear el torneo", dijo el técnico "rojo" Jorge Almirón.
Los 15 partidos de cada jornada se disputarán entre viernes y lunes.
El viernes Vélez Sarsfield recibirá a Aldosivi de Mar del Plata y Racing Club a Rosario Central.
El sábado Crucero del Norte recibirá a Tigre, Banfield a Temperley, San Lorenzo a Colón, Gimnasia y Esgrima La Plata a Defensa y Justicia, Godoy Cruz a San Martín de San Juan y Newell's Old Boys a Independiente.
El domingo Boca Juniors será local ante Olimpo de Bahía Blanca, River Plate visitará a Sarmiento de Junín y también jugarán Unión de Santa Fe-Huracán, Quilmes-Lanús y Argentinos Juniors-Atlético Rafaela.
El lunes cerrarán la primera jornada Arsenal-Estudiantes de La Plata y Belgrano de Córdoba-Nueva Chicago.