BUENOS AIRES, 31 Ago. (Reuters/Notimérica) -
El equipo dirigido por Gallardo, River Plate, solo pudo sacar un empate a 1 ante Huracán en el estadio Monumental, en el partido correspondiente a la jornada 22 de la Primera División argentina, debido a un fallo en los aspersores del terreno de juego, que se encendieron cuando aún restaban 7 minutos de partido.
Si bien es cierto no se puede adivinar si River habría acabado anotando el segundo gol que supondría la victoria tras dos encuentros en casa sin conocerla, la realidad es que el equipo de Gallardo estaba volcado hacia la meta rival, y el gol de la victoria podría haber llegado si no hubiera sido porque los aspersores decidieron activarse antes de tiempo debido a un fallo mecánico.
Durante dos minutos permanecieron encendidos, obligando al árbitro a detener el encuentro hasta que el equipo de mantenimiento del Monumental consiguiera apagarlos.
El enfado del míster Marcelo Gallardo fue monumental, ya que el incidente enfrió lo que quedaba de partido, justo en el momento en que River más atacaba. No obstante, acabó riéndose de la estrambótica situación, y alegó al final del partido que "fue muy divertido".
No tan divertido para los 'Millonarios' es que tras este empate se encuentran a 11 puntos del líder de la división, Boca Juniors, mientras que River se sitúa quinto, aunque con un partido menos.
"Sólo hubo un equipo sobre el terreno de juego en el primer tiempo, que anotó un gol y podríamos haber conseguido otro pero no logramos definir", dijo en rueda de prensa el entrenador.
Gonzálo Martínez anotó el primer gol para los locales a los 15 minutos, y posteriormente Daniel Montenegro puso las tablas en el electrónico en el minuto 40.