Por Iain Rogers
MADRID (Reuters) - Cuando Lionel Messi salió en camilla del campo de juego con lo que parecía ser una lesión grave en la rodilla durante un partido de Champions, fue un recordatorio, por si fuera necesario, de lo crucial que es el delantero argentino para la suerte del Barcelona y de su selección nacional.
Afortunadamente para los seguidores del club y de los que disfrutan viendo al Balón de Oro de la FIFA haciendo magia futbolística, las pruebas no tardaron en descartar problemas mayores que un golpe, sufrido el miércoles en una colisión con el portero del Benfica Artur cerca del final del partido del Grupo G de la Champions.
El prolífico jugador de 25 años podría estar disponible para jugar con el invicto Barça ante el Betis el domingo y, si lo hace, tendrá la oportunidad de sumar más goles a los 21 que ya anotó en 14 partidos de Liga esta temporada.
Esa cantidad es la mitad de los 48 que marcó el club en total y que contribuyeron para dejarlo en la cima de la tabla con 40 puntos, seis más que el segundo, el Atlético de Madrid.
El argentino anotó 50 de los 114 tantos que marcó el Barça por el campeonato local la temporada pasada, y 31 de los 95 en la 2010-11, además de ser el máximo goleador de la Champions durante las últimas cuatro temporadas, en las que el Barcelona ha ganado el título dos veces.
Es difícil imaginar a los azulgrana sin Messi, que no se pierde un partido por lesión desde septiembre del 2010, tras una dura entrada del por entonces defensa del Atlético Tomas Ujfalusi que le afectó a un tobillo.
Además de ser favorito a ganar por cuarta vez consecutiva el premio a Balón de Oro de la FIFA en la ceremonia del mes que viene, Messi ha participado en prácticamente todos los ataques de su equipo.
El Barça ya está clasificado para octavos de final de la máxima competición europea a la cabeza de su grupo, y al técnico, Tito Vilanova, le preguntaron tras el partido contra el Benfica por qué había sacado a Messi del banco de suplentes para la última media hora en lugar de darle descanso.
Vilanova dijo que no tenía nada que ver con el récord de Gerd Müller que anotó 85 goles en un año hace cuatro décadas, y que Messi está a punto de alcanzar con 84.
Sus dos goles contra el Athletic de Bilbao la semana pasada también le empatan con el mayor goleador del club en Liga, César Rodríguez, con 190 tantos.
"Si volviera a pasar volvería a tomar la misma decisión, ya que se puede lesionar en el entrenamiento o en cualquier momento", señaló Vilanova en una rueda de prensa.
Messi también ha sido una pieza clave en su equipo nacional, liderando a Argentina en las eliminatorias para el Mundial de Brasil 2016.
El delantero nacido en Rosario es el capitán de la selección argentina que encabeza en soledad las posiciones con 20 puntos, además de ser el máximo goleador de la competición con 7 tantos, junto al uruguayo Luis Suárez.
(Traducido por Cristina Fuentes-Cantillana en la Redacción de Madrid)