(Actualiza con detalles)
Por Sakari Suoninen y Paul Carrel
FRANCFORT, 5 dic, 5 Dic. (Reuters/EP) -
- La inflación de la zona euro seguirá debajo de las metas en los próximos dos años y el Banco Central Europeo (BCE) está listo para actuar si es necesario a fin de impulsar a una economía inmóvil, dijo la entidad el jueves.
El BCE dejó su tasa de interés clave sin cambios en el 0,25 por ciento en su último encuentro de política del año, optando por no continuar con el recorte inesperado que había aplicado en noviembre.
Los mercados esperan más medidas en 2014, una previsión que el presidente del BCE, Mario Draghi, no trató de disipar.
"Podríamos experimentar un período prolongado de inflación baja, seguido de un impulso gradual al alza (...) más adelante", dijo Draghi en conferencia de prensa. "Estamos monitorizando los acontecimientos de cerca y estamos listos para considerar todos los instrumentos disponibles", aseveró.
El funcionario dijo que la evaluación del jueves no se había enfocado en alguna medida en particular pero que hubo una "breve discusión" sobre recortar la tasa de depósitos para llevarla a territorio negativo, en un intento para que los bancos presten más.
La decisión de mantener la tasa principal de refinanciación en un mínimo récord estaba ampliamente prevista después de que la inflación se aceleró al 0,9 por ciento en noviembre, revirtiendo en parte un retroceso al 0,7 por ciento el mes anterior. La desocupación también cedió ligeramente.
El organismo monetario dijo el jueves que prevé que la inflación se mantendrá en general debajo de su meta de alrededor de 2 por ciento en los próximos dos años, descendiendo al 1,1 por ciento en 2014 antes de repuntar al 1,3 por ciento en 2015.
Para el crecimiento se prevé un ritmo lento de 1,1 por ciento el próximo año, aunque eso es ligeramente más alto que el 1,0 por ciento estimado en septiembre.
Draghi dijo que los riesgos para ese panorama estaban sesgados a la baja.
Las amenazas incluyen mayores precios de las materias primas, una demanda doméstica y un crecimiento de las exportaciones más flojos y la incapacidad de los gobiernos de la zona euro para implementar reformas estructurales.
OPCIONES DE POLITICA
Un sondeo de Reuters entre economistas la semana pasada halló que la gran mayoría no preveía que el BCE comenzaría a imprimir dinero como lo hacen la Reserva Federal estadounidense, el Banco de Japón y el Banco de Inglaterra.
El banco central británico también dejó intacta su política el jueves.
Pero la encuesta sugirió que el BCE realizará otra operación de refinanciamiento de largo plazo, conocida como LTRO por sus siglas en inglés, que da acceso a los bancos al efectivo barato, a inicios del 2014. Ya lo hizo con más de un billón de euros a fines del 2011 e inicios del 2012.
"El nivel de preparación es bastante alto en todas" las opciones de política, dijo Draghi.
Ya antes del encuentro del jueves, varios responsables habían insinuado la disposición del BCE a aliviar todavía más la oferta monetaria en caso de ser necesario, mientras que al mismo tiempo minimizaban la perspectiva de alguna iniciativa inmediata.
Con la LTRO del año pasado, los bancos invirtieron gran parte de ese dinero barato en acciones y bonos, cosechando ganancias jugosas. Al mismo tiempo, los niveles de préstamos seguían bajando.
REUTERS GB MG/