Publicado 04/03/2015 02:22

ACTUALIZA 1-Fiscal general de Brasil pide investigar a 54 políticos en escándalo corrupción Petrobras

(Actualiza con detalles, antecedentes)

Por Anthony Boadle

BRASILIA, 3 mar, 4 Mar. (Reuters/EP) -

- El principal fiscal de Brasil pidió el martes a la Supremo Tribunal Federal que abra investigaciones sobre políticos que presuntamente se beneficiaron de una trama multimillonaria de sobornos en la estatal Petroleo Brasileiro SA, dijo un funcionario de la corte.

La petición de que se autorice la investigación amplía el mayor escándalo de corrupción del país al escenario político, sacudiendo nuevamente al Gobierno de la presidenta Dilma Rousseff en momentos en que ya lucha por contener las consecuencias económicas del caso.

El funcionario, quien pidió no ser identificado debido a que el caso aún está bajo las normas de secreto, dijo que el fiscal general Rodrigo Janot pidió al tribunal que autorice 28 investigaciones independientes a 54 personas, muchas de las cuales se espera que sean políticos.

La oficina de Janot no entregó los nombres de los políticos que serán investigados, pero testimonios de los acusados que fueron parte de un acuerdo con fiscalía y que se filtraron a los medios locales indican que la mayoría son miembros del Partido de los Trabajadores y aliados de su coalición en el Congreso.

El diario Estado de S. Paulo y otros medios dijeron que la lista incluye al presidente del Senado, Renan Calheiros, y al presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, ambos miembros del Partido Movimiento Demócratico de Brasil (PMDB), el mayor aliado en la coalición gobernante de Rousseff.

Ninguno de los diarios dijo cómo obtuvo la información.

Bajo la ley brasileña, los políticos y miembros del gabinete solamente pueden ser juzgados por la Corte Suprema. El juez a cargo del caso debe decidir si levanta la provisión de secreto y divulga los nombres y las declaraciones del acuerdo con la fiscalía.

Los políticos fueron identificados por ex ejecutivos de alto rango de Petrobras y un operador de cambios del mercado negro cuyo arresto en marzo pasado inició una investigación sobre el desvío de dinero desde contratos de obras de infraestructura con precios excesivos hacia el bolsillo de políticos y ejecutivos corruptos.

Parte de ese dinero, dicen los fiscales, podría haber ayudado a financiar campañas electorales de partidos políticos, incluido el Partido de los Trabajadores de Rousseff y otros miembros de su coalición de Gobierno.

CUENTAS SUIZAS

La investigación sobre el caso de corrupción, conocida como "Operación Lavado de Autos", ha llevado hasta el momento a 40 acusaciones por cargos de fraude, soborno y lavado de dinero.

Funcionarios han acusado a dos ex ejecutivos de alto rango de Petroleo Brasileiro SA, como se conoce formalmente a la empresa, y 23 ejecutivos de seis de las principales compañías de construcción e ingeniería de Brasil.

El escándalo amenaza con tener repercusiones sobre la ya débil economía de Brasil, llevando a Petrobras a detener o cancelar varios proyectos de inversión.

Compañías de los sectores de petróleo y gas, construcción y energía también están hallando problemas para conseguir créditos debido a que los bancos están realizando ajustes como consecuencia del escándalo.

Los fiscales buscan que las compañías de construcción devuelvan cerca de 1.600 millones de dólares que sustrajeron a través de los contratos con Petrobras y están investigando cuentas bancarias en Suiza a las que fueron transferidos los fondos y en algunos casos lavados mediante compañías ficticias en el extranjero.

La investigación y el posible juicio a los políticos ante el Supremo Tribunal Federal podría tomar años. El mayor caso de corrupción política de Brasil hasta la fecha, que involucra pagos mensuales a legisladores a cambio de su apoyo al Partido de los Trabajadores en el Congreso, tardó siete años antes de que se iniciara su juicio en el 2012.

"La investigación ha comenzado. Nosotros la llevaremos hasta el final", dijo Janot el lunes. "Los responsables pagarán", declaró frente a un grupo de manifestantes que protestaban contra la corrupción afuera de su oficina.

Rousseff fue presidenta del directorio de Petrobras desde el 2003 al 2010, cuando sucedió gran parte de los presuntos hechos de corrupción. Ella negó que supiera sobre la trama durante esos años y ha prometido respetar la independencia de los tribunales.

Un reciente sondeo de opinión, sin embargo, mostró que tres de cada cuatro brasileños creen que Rousseff conocía la trama.