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MÉXICO DF, 9 feb, 9 Feb. (Reuters/EP) -
- La inflación de México se moderó en enero a un 3.07 por ciento a tasa anual, su menor nivel desde marzo del 2011, debido a menores precios de algunos productos agrícolas y de servicios como telefonía celular y electricidad, dijo el lunes el instituto de estadísticas, INEGI.
Analistas en un sondeo de Reuters esperaban que la inflación se ubicara en un 3.10 por ciento hasta el primer mes del año, por debajo del 4.08 por ciento que alcanzó hasta diciembre y del 4.48 por ciento registrado en enero del 2014.
La inflación se ha ido desacelerando desde un máximo de nueve meses en octubre y el banco central ha dicho que podría bajar a menos del 3 por ciento al cierre del año, en medio de una débil demanda en la economía.
El autónomo banco central tiene un objetivo de inflación del 3 por ciento más o menos un punto porcentual.
La entidad mantuvo en enero su tasa de interés de referencia en un 3 por ciento, aunque está previsto que este año decida aumentarla siguiendo un alza esperada en los tipos de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos.
"La inflación fue muy baja en enero pero debe notarse que la fuerte baja (...) se debió en gran parte a estacionalidad favorable, un fuerte descenso en los volátiles precios de alimentos perecederos y el ajuste a la baja en tarifas de servicios de telecomunicaciones", dijo Alberto Ramos de Goldman Sachs en un reporte.
En enero de 2015, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) presentó una disminución mensual de 0.09 por ciento, frente al avance del 0.49 por ciento del mes precedente y el 0.89 por ciento registrado en enero del 2014.
Analistas esperaban que el indicador mostrara un descenso del 0.06 por ciento, según el sondeo.
El índice subyacente, que excluye algunos productos de alta volatilidad, registró una reducción de un 0.03 por ciento, para una variación anual del 2.34 por ciento, dijo el INEGI.
Los analistas consultados por Reuters estimaban para el indicador un alza del 0.02 por ciento en enero.
Los precios de productos agropecuarios bajaron un 0.78 por ciento, en tanto que los de energéticos y tarifas autorizadas por el Gobierno aumentaron un 0.05 por ciento. Los precios de los servicios bajaron un 0.24 por ciento.