(Actualiza con detalles de diálogo y reacciones)
Por Alexandra Hudson
BERLIN, 30 sep, 30 Sep. (Reuters/EP) -
- La canciller alemana, Angela Merkel, mantendrá el viernes conversaciones con el Partido Social Demócrata (SPD) y también planea reunirse con los Verdes con la perspectiva de formar un Gobierno de coalición.
El SPD es visto como el socio más probable de Merkel, pero sus integrantes dijeron el lunes que no se apurarán a sellar un acuerdo, lo que sugiere que la formación de un nuevo Gobierno podría postergarse hasta enero.
Los socios europeos de Alemania están siguiendo de cerca las negociaciones para formar una coalición en Berlín, preocupados sobre lo que un retraso pueda significar en importantes medidas de la UE para combatir la crisis, como el ambicioso proyecto de la unión bancaria.
"Nadie puede decir cuándo llegaremos al punto en que el Gobierno pueda ser formado, puede ser diciembre o enero", dijo Andrea Nahles, secretaria general del SPD. "No nos apuraremos", agregó.
Existe una fuerte resistencia entre los miembros del SPD a formar parte de otra "gran coalición" con Merkel, después de ser socios en su primer período de Gobierno y luego de ello obtener su peor resultado de la posguerra en la elección de 2009.
El saliente socio de Merkel, los Demócratas Libres (FDP), sufrió la misma suerte. Después de cuatro años como su socio minoritario, quedó fuera del Parlamento alemán por primera vez desde 1949.
Nahles dijo que las conversaciones del viernes examinarán si los compromisos políticos son posibles.
Una vez que esas discusiones preliminares se completen, un grupo de 200 funcionarios del SPD de distintas partes de Alemania deberán dar luz verde antes de que el partido entre en negociaciones de coalición más formales con los conservadores de Merkel.
"Me gustaría subrayar que no volveremos al partido con las manos vacías", dijo Nahles.
El objetivo del diálogo formal sería acordar un proyecto político para el nuevo Gobierno, así como la designación de los principales puestos del gabinete.
El SPD ha dicho que tendrá que volver a su base de 472.000 miembros y buscar su aprobación antes de acordar la formación de una coalición con Merkel.
Esto eleva la presión sobre la canciller para hacer compromisos, pero también plantea un riesgo mayor para los líderes del SPD.
Si los miembros ordinarios del SPD rechazaran un acuerdo de coalición negociado por sus líderes, el presidente del partido Sigmar Gabriel y otras figuras de relevancia probablemente tendrían que renunciar.