Publicado 01/07/2014 01:36

ACTUALIZA 2-Tenedores bonos impagos acusan a Argentina de no negociar, país dice hablará con mediador

(Agrega detalles de viaje de delegación argentina y reunión en OEA)

Por Daniel Bases

NUEVA YORK, 30 jun, 1 Jul. (Reuters/EP) -

- Tenedores de bonos soberanos impagos acusaron el lunes a Argentina de negarse a negociar para resolver un viejo pleito de deuda que la mantiene al borde del default, pero horas después el país sudamericano anunció que enviará una delegación a Estados Unidos para dialogar con el mediador judicial.

"La voluntad profesada por Argentina de negociar con sus acreedores ha probado ser otra promesa rota. NML está sentado a la mesa, listo para hablar, pero Argentina se ha negado a negociar cualquier aspecto de esta disputa", dijo Jay Newman, administrador de cartera senior de Elliott Management, que controla NML Capital Ltd, uno de los demandantes en el caso.

Sin embargo el gobierno argentino aseguró el lunes por la tarde que una comitiva del país se reunirá la próxima semana con el mediador judicial que está intentando sentar a las dos partes a la mesa de negociaciones.

"El Ministerio de Economía informa que se ha designado una delegación para reunirse el día 7 de julio" con el mediador Daniel Pollack, dijo la dependencia argentina en un escueto comunicado que no brindó más detalles.

Argentina depositó el jueves el pago para un cupón con vencimiento el 30 de junio para los tenedores de deuda reestructurada sin desembolsar otros 1.330 millones de dólares a los acreedores que no aceptaron el canje de deuda, como había ordenado el juez estadounidense Thomas Griesa.

Pero los bancos de Estados Unidos tienen prohibido hacer los pagos a los acreedores de Argentina. Griesa dijo el viernes que el depósito era ilegal y que el dinero debía ser devuelto al gobierno argentino.

Si el dinero no llega a manos de los tenedores de deuda reestructurada el lunes, se considera que Argentina entrará en un default técnico. Pero tiene un período de gracia de 30 días que termina el 30 de julio para llegar a un acuerdo que acabe con la vieja batalla legal o caerá en un incumplimiento de pagos por segunda vez en 12 años.

Griesa designó a Pollack, un veterano abogado financiero de Nueva York, como asistente especial para ayudar a lograr un acuerdo entre Argentina y los tenedores en disputa.

"Argentina reitera su vocación para negociar en condiciones justas, equitativas y legales que contemplen los intereses del 100 por ciento de los acreedores, lo que significa puntualmente que se permita cobrar a los bonistas reestructurados en el vencimiento en curso", dijo el comunicado del ministerio argentino.

Argentina incumplió con una deuda soberana de unos 100.000 millones de dólares en 2001-2002 y negoció una reestructuración con el 93 por ciento de los tenedores de bonos en un acuerdo considerado uno de los más costosos para inversores en la historia, pagando entre 25 y 29 centavos por dólar adeudado.

"No hay negociaciones en marcha, no ha habido ninguna negociación, y Argentina se resiste a comprometerse a negociaciones en el futuro. El gobierno de Argentina ha elegido poner al país al borde del default. Sinceramente esperamos que reconsidere este camino hacia un callejón sin salida", dijo Newman en un comunicado enviado por correo electrónico a medios.

CONTRA GRIESA

El Ministerio de Economía argentino no hizo comentarios sobre las palabras de Newman, pero el Gobierno criticó más temprano al juez Griesa.

"Es la primera vez que un juez pretende alterar un contrato, un prospecto, una relación contractual e impedir el pago a un bonista reestructurado que adhirió voluntariamente a las mismas leyes del Estado de Nueva York que el representa", dijo el lunes el jefe de Gabinete de Ministros, Jorge Capitanich, a periodistas.

La semana pasada el ministro de economía Axel Kicillof viajó a Nueva York en una visita relámpago para hablar en un encuentro del comité del G77 más China en las Naciones Unidas, en donde dijo que el país estaba siendo empujado a un default.

El funcionario dijo entonces que no se reunió con los acreedores en pleito, conocidos como holdouts, liderados por los fondos de cobertura Elliott y Aurelius Capital Management.

BNY Mellon confirmó el viernes que el país depositó 539 millones de dólares en una cuenta del Banco Central en Buenos Aires para cumplir con un cupón que vence el 30 de junio y pagar a los tenedores que aceptaron los canjes del 2005 y 2010.

En total, el Gobierno transfirió 832 millones de dólares para el pago de varios tenedores de bonos.

Griesa había establecido en un fallo previo que Argentina no podía hacer ese pago a menos que desembolsara otros 1.330 millones de dólares a los holdouts, basándose en una cláusula pari passu, de igualdad de condiciones, utilizada para la venta original de los bonos en 1994.

"La decisión de Griesa no le dio la oportunidad a los holdouts de cobrar porción alguna del dinero que reclaman pero dejó al gobierno sin la posibilidad de ejercer el pago de la deuda reestructurada de los títulos bajo ley extranjera", dijo la consultora Delphos Investment.

La Organización de Estados Americanos (OEA) aprobó un pedido de Argentina para convocar a una reunión de consulta de cancilleres el próximo jueves a fin de considerar el caso de reestructuración de deuda soberana, informó la agencia oficial argentina Télam.