Por Philipp Halstrick y Angelika Gruber
FRANCFORT (Reuters/EP) - El Gobierno de Alemania podría entregar 4.500 millones de euros (6.350 millones de dólares) en ayuda estatal a la automotriz Opel, dijo el viceministro de Economía germano, quien advirtió que el viernes General Motors podría decidir a quién venderá su filial.
Jochen Homann ratificó el miércoles lo que le había señalado al diario Frankfurter Allgemeine Zeitung, donde agregó que la propuesta de ayuda estatal se entregaría en caso de que el fabricante canadiense de partes automotrices Magna sea quien se quede con Opel.
"Podríamos dejar disponible un préstamo, para luego acordar con precisión cómo se van a compartir los costos con otros países europeos", dijo el miércoles el viceministro alemán de Economía, Jochen Homann, a Reuters.
La oferta de última hora permitiría que el Gobierno federal alemán y los estados con plantas de Opel se dividan la ayuda, sin necesidad de esperar a que entren al plan otros países europeos en los que hay plantas de la filial de GM, había comentado Homann al periódico.
Pero el funcionario añadió a Reuters que era posible que el directorio de General Motors haga el viernes una recomendación respecto a cuál de las dos ofertas por su filial Opel prefiere: Magna o el inversor financiero belga RHJ.
"Estamos en el último tramo", dijo una fuente que ratificó la reunión de directorio del viernes.
El fideicomiso que supervisa actualmente a Opel -que fue apuntalada con ayuda estatal alemana en mayo para evitar ser arrastrada por la breve bancarrota de GM- tiene que dar el visto bueno a cualquier decisión de la compañía estadounidense.
GM rechazó hacer comentarios.
EN LUCHA
La canciller alemana, Angela Merkel, y estados alemanes con plantas de Opel se mostraron claramente a favor de la oferta de Magna, debido a que piensan que la experiencia del grupo canadiense puede salvaguardar más de 25.000 empleos de la firma en Alemania.
La oferta del grupo belga RHJ busca una menor ayuda estatal y se ganó los comentarios favorables de algunos funcionarios de GM, pero Berlín y los líderes sindicales la miran con escepticismo.
Sin embargo, la plantilla de Opel está dividida en su favoritismo, preocupada por los empleos.
"Preferimos la oferta de RHJ porque da mayores garantías de empleo para la planta española", dijo un portavoz del sindicato UGT en Madrid. UGT teme que 1.400 empleos en Zaragoza puedan suprimirse si gana RHJ y 1.700 si gana Magna.
En España, Opel tiene una fábrica en Figueruelas, provincia de Zaragoza, que emplea a más de 7.000 trabajadores y produjo 423.000 vehículos el año pasado, entre ellos el modelo Corsa de cinco puertas, la minivan Meriva basada en la plataforma del Corsa, y el utilitario Combo.
John Fetherston, coordinador jefe de la planta británica de Vauxhall -en Ellesmere Port- para el sindicato Unite, dijo que su formación no ha respaldado a ningún favorito, aunque varias informaciones han sugerido que RHJ sería mejor para las plantas británicas.
"Nos han dicho que la oferta de RHJ implicaría volúmenes (de capacidad de producción anual) de 200.000 (y) sin pérdidas de empleo -hemos visto documentación a tal efecto- pero aún habría muchas más preguntas por hacer, ya que ambas, RHJ y Magna, buscarían reducir costos", comentó.
Vauxhall emplea a alrededor de 4.700 personas en Gran Bretaña y tiene plantas en Ellesmere Port y Luton.
Magna y RHJ planean recortar alrededor de 10.000 empleos de Opel en Europa, un quinto de la plantilla.
Alemania podría librarse de perder empleos, aunque RHJ sugirió que la planta de Eisenach podría detener su producción dos años. Magna quiere que las cuatro plantas alemanas sigan operando.
El líder sindical alemán Armin Schild, del consejo de supervisión de Opel, apeló a que los sindicatos tengan una visión más amplia del acuerdo.
"No puede ser que todo el mundo tenga una visión provincialista y promuevan cosas para ganar ellos mismos", dijo, advirtiendo otra vez contra una división de los trabajadores mediante "triquiñuelas".
Rudi Kennes, segundo líder sindical de Opel en Europa y representante del sindicato belga ABVV, dijo que en Bélgica en general se prefiere a Magna.
"La primera prioridad es que Opel sobreviva -si no hay Opel, no hay tampoco Opel Amberes. Si los españoles aún piensan que el sol gira alrededor de España y viceversa, están equivocados. Pero tienen el derecho de tener opiniones propias, aunque sean muy estrechas", agregó.
Las operaciones europeas de Opel se extienden también a Polonia.
(1 dólar = 0,7091 euros)