Publicado 12/03/2015 19:38

ANÁLISIS-Inversores ven mayores rendimientos tras reporte empleo EEUU

Por Richard Leong

NUEVA YORK, 12 mar, 12 Mar. (Reuters/EP) -

- Antes del viernes pasado, muchos inversores opinaban que la Reserva Federal estadounidense probablemente elevaría las tasas de interés solo una vez este año.

La primera subida en unos nueve años sería casi simbólica, como si el banco central estuviera mostrando que todavía sabe cómo hacerlo.

Ahora, cada vez menos inversores están hablando del ajuste simbólico, después de un reporte del empleo de febrero imprevistamente fuerte que indicó que la economía podría estar cobrando impulso.

Movimientos dramáticos en el mercado de bonos, junto con el avance del dólar, muestran que más inversores se están posicionando para una serie de incrementos de tasas en el 2015, más que un solo aumento.

El viernes, los rendimientos de los bonos de corto plazo registraron sus mayores alzas en un mes debido a la creciente percepción de que la Fed elevará las tasas varias veces en el segundo semestre de 2015.

Y las tasas de largo plazo subieron todavía más, con el rendimiento a 10 años registrando su mayor ascenso en más de un año.

Antes de los datos del empleo muchos inversores habían descontado el momento del primer incremento de tasas para más adelante este año. Incluso algunos siguen pensando que en 2015 podría no ocurrir ningún movimiento.

"Me sorprende la recuperación que hemos visto", dijo Kristina Hooper, jefa de estrategias de cartera de Allianz Global Investors en Nueva York, que maneja 499.000 millones de dólares. "Ha cambiado la percepción del mercado".

La escalada de los rendimientos llevó a algunos inversores a tornarse más reticentes a la hora de comprar bonos del Tesoro y a considera volcarse a bonos más riesgosos, de mayores rentabilidades.

Los especuladores tomando posiciones cortas contra el bono referencial a 10 años en el mercado de futuros podrían incrementar esas apuestas, que se encontraban en el máximo en siete semanas antes del reporte del empleo.

Los analistas de Bank of America Merrill Lynch dijeron el lunes que podría ser el momento más rentable de todos los tiempos para apostar a un aumento de tasas estadounidenses de corto plazo.

Cualquier evidencia de debilitamiento del crecimiento estadounidense u otro brote entre Grecia y sus acreedores europeos podría hacer que los inversores reconsideren si la presidenta de la Fed Janet Yellen y otros altos funcionarios de la Fed subirán pronto las tasas.

Algunos economistas, incluyendo a Lawrence Summers, apuntan a la escasa inflación, particularmente de los salarios, y han instado a que la Fed no suba las tasas "hasta ver el blanco en los ojos de la inflación".

La perspectiva de que la Fed podría ajustar su política este verano boreal está haciendo que más dinero salga de fondos enfocados en los bonos del Tesoro de plazos largos.

Por ejemplo, el fondo ETF de bonos corporativos de grado de inversión iBoxx de BlackRock, que compra valores con rendimientos más altos que la deuda gubernamental, registró ingresos de 1.400 millones de dólares en febrero, comparado con salidas de 90 millones de dólares de su fondo de bonos del Tesoro a 20 años o más largos.

"El mercado de bonos del Tesoro sigue bastante caro, con rendimientos bastante bajos. Creemos que hay una mejor oportunidad para rotar a bonos corporativos y de mercados emergentes", dijo John Bellows, gerente de cartera de Western Asset Management Co en Pasadena, California, con activos por 466.000 millones de dólares.

El mercado de acciones no ha sido menos inmune, pues el índice Standard & Poor's 500 acumuló bajas desde el cierre del jueves.

Los mercados de futuros han vuelto a sugerir un incremento de tasas estadounidenses en junio.

El nuevo panorama sobre el momento y ritmo de un "despegue" de las tasas de la Fed acerca a los futuros al consenso que desde hace tiempo existe entre algunos inversores de largo plazo y economistas de Wall Street.

Un sondeo de Reuters mostró el lunes que la Fed se mantiene en curso para subir las tasas de interés en junio, ya que un rápido fortalecimiento del mercado laboral y su eventual presión alcista sobre los salarios contrarresta la persistentes preocupaciones sobre la baja inflación.