Publicado 12/11/2013 14:45

Asmussen y Nowotny del BCE ven espacio para más recortes de tasas

Por Annika Breidthardt y Georgina Prodhan

BERLIN/VIENA, 12 nov, 12 Nov. (Reuters/EP) -

- Las tasas de interés del Banco Central Europeo (BCE) no han llegado aún a un nivel mínimo pese al recorte realizado la semana pasada, dijeron el martes dos funcionarios del organismo.

El miembro del directorio ejecutivo del BCE Joerg Asmussen también afirmó que cobrar a los bancos por mantener su efectivo en el banco central sigue siendo una opción, mientras que el miembro del consejo gobernante del banco Ewald Nowotny afirmó que la estancada economía de la zona euro era una preocupación mayor que la inflación.

"Dependiendo de cómo se desarrolle la inflación, no estamos al final de nuestros límites sobre las tasas de interés", comentó Asmussen al diario Neue Osnabruecker Zeitung en una entrevista publicada el martes.

Nowotny, en declaraciones dadas en una conferencia bancaria, entregó un mensaje similar y sostuvo que, a diferencia de la Reserva Federal de Estados Unidos, el BCE tiene espacio para reducir aún más las tasas de interés.

"Hemos estado llevando (...) al límite los instrumentos convencionales. En muchos casos hemos alcanzado el límite menor de cero, no el BCE, pero sí por ejemplo la Fed", comentó.

El BCE recortó el pasado jueves su principal tasa de refinanciamiento a un mínimo histórico de 0,25 por ciento, luego de que la inflación alcanzó un 0,7 por ciento en octubre, bastante por debajo de la meta del banco central de menos, pero cerca, de un 2 por ciento.

Nowotny fue cauteloso sobre la inflación, pero dijo que el estancamiento de la recuperación económica era el mayor riesgo por ahora.

"La inflación no es un peligro, es el estancamiento", afirmó Nowotny en un evento organizado por Pioneer Investments.

Además del recorte de la principal tasa de interés del BCE, Asmussen planteó otras dos opciones para aliviar la política monetaria: una tasa de depósitos negativa y reducir el encaje bancario.

Al mismo tiempo, aunque mantuvo abierta la posibilidad de comenzar a cobrar a bancos por depositar su dinero de sobra en el BCE, advirtió que no se tome dicha decisión a la ligera.

Dicha medida podría tener efectos secundarios y los mercados han permanecido escépticos respecto a si el BCE la aplicará.