Actualizado 05/07/2015 20:12

BOJ mantiene visión optimista sobre la economía, se abstiene de modificar política monetaria

Por Leika Kihara

TOKIO, 4 sep, 4 Sep. (Reuters/EP) -

- El Banco de Japón mantuvo su enorme estímulo monetario y su visión optimista sobre la economía el jueves, imperturbable ante las señales recientes de que los efectos de un alza del impuesto sobre las ventas en abril pueden durar más que lo esperado y hacer más difícil que alcance su objetivo de inflación.

Pero el BOJ (por su sigla en inglés) redujo su evaluación de la inversión en vivienda y advirtió que la producción fabril se mantuvo débil, reconociendo la inquietud de los miembros en su directorio que temen que un repunte en la economía después de una severa contracción en el segundo trimestre puede ser bastante modesto.

"La economía de Japón sigue recuperándose moderadamente como una tendencia", aunque los efectos de la subida del impuesto sobre las ventas en abril aún persisten, dijo el banco central en un comunicado emitido después de su reunión de política monetaria, manteniendo su evaluación desde el mes pasado.

El consumo privado sigue firme en momentos en que se está moderando el efecto del aumento del impuesto sobre las ventas a un 8 por ciento desde un 5 por ciento, aunque la inversión en vivienda continúa sintiendo el efecto del alza impositiva, dijo el BOJ. En agosto, agregó, el impacto tanto en la inversión en vivienda como en el consumo se redujo.

Una serie reciente de débiles datos, incluyendo una caída en el gasto de los hogares y una expansión mediocre de la producción fabril en julio, ha puesto en duda la opinión del Banco de Japón de que la economía rebotará de manera constante.

Pero el banco central mantuvo su proyección de que la economía seguirá recuperándose moderadamente, por la expectativa de que el consumo se beneficiará de un ajuste en el mercado laboral, lo que está empujando al alza los salarios.

El optimismo del BOJ contrasta con las dudas crecientes entre los analistas del sector privado de que la economía pueda crecer con la suficiente solidez para que la inflación -ahora en torno a un 1,3 por ciento- se acelere hacia la meta del banco central de un 2 por ciento.

Tal como se esperaba, el banco central dejó sin cambios su marco de políticas, bajo el cual se ha comprometido a aumentar la base monetaria en 60 a 70 billones de yenes (571.000 a 666.000 millones de dólares) al año a través de compras agresivas de activos para reactivar a la economía.

"El BOJ está diciendo que ahora hay partes de la economía más débiles que lo previsto, pero aún espera que el crecimiento se acelere en el futuro", dijo Hiroshi Miyazaki, economista de Mitsubishi UFJ Morgan Stanley de Valores.

"Es posible que el BOJ revise a la baja las previsiones del PIB de este año fiscal, pero siempre y cuando espere un crecimiento saludable para el próximo año fiscal, no veo ningún cambio en su postura de política", agregó.