Actualizado 18/04/2007 21:28

Bolivia.- El Ejército controla las plantas petroleras tras los incidentes que dejaron un muerto y 20 heridos


LA PAZ, 18 Abr. (EP/AP) -

El Ejército controla varias instalaciones de hidrocarburos del sur de Bolivia tras los violentos choques que protagonizó con civiles que intentaron tomarlas en la disputa de dos provincias por la posesión de un campo de gas, que dejaron un muerto y una veintena de heridos.

El portavoz presidencial, Alex Contreras, informó a la prensa de que ha retornado la calma a la zona y que por determinación del presidente, Evo Morales, el Ejército se ha desplegado para "resguardar" esas instalaciones.

Se trata de una estación del gasoducto a Argentina, administrada por Transredes, que tiene por socia a la anglo-holandesa Shell y a la británica Ashmore, y una planta de producción de gas operada por la brasileña Petrobras, que alimenta exportaciones a ese país y Brasil.

Contreras dijo que el Gobierno no tiene información oficial sobre víctimas, pero informes de las autoridades regionales y de la prensa local sostienen que un civil murió por impacto de bala y otra veintena resultó con heridas de diversos proyectiles.

Los choques, en los que participaron centenares de soldados, se iniciaron en el municipio de Yacuiba, donde cerca de mil vecinos tomaron el martes momentáneamente la planta de bombeo de gas de Pocitos, para cortar el envío del energético a Argentina.

Los enfrentamientos se trasladaron a Villamontes, donde se habría registrado la muerte. Yacuiba está 770 kilómetros al sureste de La Paz, en la frontera con Argentina, y 90 kilómetros al sur de Villamontes.

En un intento por garantizar la paz, el Gobierno trasladó la decisión sobre el conflicto de límites entre la provincia Gran Chaco, al que pertenecen esas localidades, y la de O'Connor, a una instancia imparcial atendiendo la exigencia de los miles de manifestantes.

Las autoridades de O'Connor rechazaron la decisión y anunciaron protestas. Esa provincia sostiene que el megacampo de gas y petróleo de Margarita, administrado por la hispano-argentina Repsol YPF, ocupa parte de su territorio.

El presidente Morales dijo en breves declaraciones a la prensa, antes de entrar a una reunión con sus ministros donde debía tratarse el asunto, que el conflicto es de intereses económicos, pues la definición afectará a la distribución de futuras regalías.