LA PAZ, 1 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Evo Morales ha intervenido este lunes la Empresa Pública de Servicio de Agua y Saneamiento (EPSAS) de La Paz con el fin de garantizar el servicio a los ciudadanos y ha instado a la gobernación provincial y las alcaldías de la capital y El Alto, a las que suministra, a que trabajen en un nuevo modelo de administración.
El viceministro de Agua Potable y Saneamiento Básico, Rubén Méndez, ha indicado que la intervención a EPSAS se efectúa porque hubo muchos cuestionamientos y frente a la incertidumbre sobre el futuro del servicio.
"Hay muchos reclamos sobre los servicios, también hemos revisado sus estados financieros y no han cumplido con el contrato que tenía como concesión y la licencia que ha dado la Autoridad de Agua Potable y Saneamiento (AAPS), no ha cumplido con los indicadores", ha señalado, en declaraciones recogidas por radio Erbol. Según Méndez, hay una pérdida de cerca de 35 por ciento de agua que no está siendo facturada.
El presidente ejecutivo de la AAPS, Germán Aramayo, ha indicado que la entidad se hará cargo de EPSAS por seis meses a través de un interventor, mientras que paralelamente se irá definiendo el modelo de gestión. Asimismo, ha garantizado la estabilidad laboral de los trabajadores.
En declaraciones a Radio Fides, Aramayo ha explicado que se ha ordenado el resguardo policial de la oficina central y las plantas de tratamiento de EPSAS para garantizar la intervención y que ésta proceda de forma pacífica.
"Ellos han incumplido y cometido una serie de irregularidades en la parte administrativa y técnica, en la parte financiera, además han incumplido el tema de la Constitución Política del Estado, por ello la Autoridad de Agua Potable y Saneamiento ha emitido una resolución revocando su licencia de prestación de servicios", ha indicado Aramayo.
A partir de este momento será la Autoridad de Agua será quien se haga cargo del funcionamiento de EPSAS, mientras se constituye la nueva empresa. "Esto será hasta que podamos generar una operadora a través de la Gobernación de La Paz y los Gobiernos Municipales de La Paz y El Alto", ha precisado.
Aramayo ha pedido a los trabajadores que actúen con normalidad porque se está garantizando la estabilidad laboral ya que no se tiene previsto ningún tipo de cambio en este aspecto. "No habrá ningún efecto sobre nuestros compañeros que están en la parte de la prestación del servicio", ha señalado.
EPSAS fue creada en 2006 para que se haga cargo de los servicios que prestaba la nacionalizada Aguas del Illimani. Su funcionamiento debía ser transitorio y no debía superar los seis meses, sin embargo una comisión amplió su periodo de operaciones.
La falta de inversión y otras irregularidades provocaron que finalmente se decida su extinción y se ponga en proceso la creación de una nueva empresa que se haga cargo del servicio de agua potable y saneamiento en las ciudades de La Paz y El Alto, aclara Radio Fides.