Por Wayne Cole
SIDNEY, 12 mar, 12 Mar. (Reuters/EP) -
- Las bolsas de Asia caían el miércoles debido a la incertidumbre económica en China y Estados Unidos que se combinaba con las tensiones políticas en Ucrania para mantener a los inversores cautelosos y las materias primas bajo una nube oscura.
En Japón, el índice Nikkei de la bolsa de Tokio retrocedió un 2,2 por ciento, continuando el patrón de avance y retroceso de los últimos dos meses, mientras que las acciones australianas perdieron un 0,6 por ciento.
El índice MSCI de acciones en Asia excluyendo a Japón caía un 1,1 por ciento.
La sesión asiática reflejaba un desempeño mediocre en Wall Street, donde unos datos débiles dejaron a los inversores sin una confirmación de si los problemas de la economía de Estados Unidos están ligados al clima o si son algo más preocupante.
El Dow Jones bajó el martes un 0,41 por ciento, mientras que el S&P 500 perdió un 0,51 por ciento.
En Asia, los inversores esperaban datos chinos sobre la producción industrial, las ventas minoristas y la inversión urbana que serán reportados el jueves y que podría ofrecer alguna claridad sobre hacia dónde se dirige la economía.
Un potencial positivo fue un reporte de Reuters que dijo que el banco central de China está dispuesto a relajar su política monetaria si el crecimiento económico se ralentiza aún más, mediante la reducción de la cantidad de dinero que los bancos deben mantener como reservas.
Citando fuentes involucradas en las discusiones internas, el reporte dijo que una flexibilización se activaría si el crecimiento cae por debajo del 7,5 por ciento.
Mientras tanto, la cautela era la consigna en momentos en que las preocupaciones sobre el estado de la demanda en China continuaban presionando a las materias primas industriales, en particular el cobre y el mineral de hierro.
Ambos metales se han utilizado en China como garantía para préstamos, dejando a los comerciantes y acerías vulnerable a una contracción del crédito.
En los mercados de divisas, el dólar cedía levemente contra el yen a 102,97 yenes en momentos en que la moneda japonesa se beneficiaba de su condición tradicional de refugio seguro.
El euro bajaba a 1,3855 dólares después de que funcionarios del Banco Central Europeo recordaron a los inversores que aún hay un margen para relajar la política si es necesario.
Uno de los beneficiarios de la incertidumbre global ha sido el oro al contado, que subió el miércoles a un máximo en cuatro meses y medio de 1.359,25 dólares la onza.
El crudo Brent de Londres restaba 26 centavos, a 108,29 dólares el barril, y el petróleo estadounidense retrocedía 61 centavos, a 99,42 dólares el barril.