Por Hideyuki Sano
TOKIO, 13 mar, 13 Mar. (Reuters/EP) -
- Las bolsas en Asia rebotaban cautelosamente el jueves desde mínimos en dos semanas, pero las ganancias fueron recortadas luego de que unos decepcionantes datos de ventas minoristas y de producción fabril avivaron la inquietud de los inversores sobre una desaceleración en China.
La crisis en Ucrania y una caída importante en los precios del cobre en las últimas semanas también ha asustado a los inversores, aunque un cierre plano en Wall Street y algunos datos positivos en Australia y Japón ayudaban a amortiguar el golpe.
El índice MSCI de acciones asiáticas fuera de Japón subía un 0,5 por ciento, recuperando la mitad de sus pérdidas del día anterior, con los valores en Australia trepando por sólidos datos locales de empleo.
Pero los débiles datos chinos golpearon a muchos mercados.
En Japón, el índice Nikkei de la bolsa de Tokio cayó un 0,1 por ciento, borrando las ganancias logradas luego de que datos mostraron que los pedidos de maquinaria en el país superaron las expectativas.
Las acciones surcoreanas también borraron la mayor parte de sus ganancias para cerrar con un avance de un 0,1 por ciento.
"Lo que estamos viendo hoy es una reacción a la fuerte caída de ayer sobre la base de méritos (de valoración) de precio", dijo el analista de Hana Daetoo Chang Hee-jong.
"Pero las preocupaciones sobre China siguen siendo el mayor problema para el mercado, y esto seguirá afectando a los mercados durante el primer semestre de este año", agregó.
El crecimiento de la producción industrial de China estuvo por debajo de las previsiones en el período combinado enero-febrero, y las ventas minoristas también fueron más débiles que lo esperado, alimentando el temor a que el crecimiento pueda ceder en momentos en que Pekín impulsa reformas económicas.
"Las cifras en enero-febrero fueron decepcionantes, lo que implica un impulso de crecimiento más débil en la economía china. Probablemente se acerca una tormenta", dijo Gao Yuan, analista de Haitong Securities en Shanghái.
El estancamiento diplomático entre Rusia y Occidente sobre Ucrania también ha llevado a los inversores a comprar activos vistos como refugio seguro luego de que la Unión Europea acordó el miércoles un marco para sus primeras sanciones contra Rusia desde la Guerra Fría.
El oro al contado alcanzó un máximo de seis meses de 1.374,85 dólares la onza.
En el mercado de divisas, el franco suizo tocó un máximo en dos años y un año y medio de 0,87322 unidades contra el dólar, mientras que el yen que está bajo la presión del alivio del Banco de Japón, subía ligeramente.
El euro también anotó un máximo en dos años y medio de 1,3949 dólares, en una posible señal de que la divisa está recuperando un estatus de refugio seguro mientras se recupera de la crisis de deuda soberana.
Los futuros del crudo estadounidense operaban cerca de los mínimos en un mes que anotaron el miércoles después de que Washington anunció un sorpresivo plan para un lanzamiento de prueba de las reservas estratégicas de petróleo, cotizando a 98,06 dólares por barril.
Pero el crudo Brent de Londres se mantenía relativamente firme a 108,14 dólares el barril.