Actualizado 03/07/2009 01:18

Brasileña Queiroz construirá hidroeléctrica en Nicaragua en 2010

MANAGUA (Reuters/EP) - El grupo brasileño Queiroz Galvao dijo el jueves que comenzará a construir el año próximo un proyecto hidroeléctrico de 600 millones de dólares en la costa del Caribe en el sur de Nicaragua, con la participación de la empresa estatal brasileña Eletrobras.

La planta de 200 megavatios de energía podría comenzar a inyectar electricidad a la red en cuatro años.

Los estudios de factibilidad para la hidroeléctrica "Tumarín", a unos 240 kilómetros al sureste de Managua, serán finalizados este año, luego que el Congreso de Nicaragua aprobó el miércoles una ley especial para desarrollarlo.

La ley establece un depósito de 42 millones de dólares en garantía por la ejecución del proyecto.

El consorcio encargado de la construcción está buscando financiamiento con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y del Banco Mundial para el desarrollo de la hidroeléctrica.

También están buscando financiamiento con el regional Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), añadió en una presentación del proyecto a periodistas Marcelo Conde, presidente del consorcio Centrales Hidroeléctricas de Centroamérica (CHC).

La central será construida por Central Hidroeléctrica de Nicaragua, parte de CHC.

"Nosotros estamos comenzando la obra en el primer trimestre del próximo año", dijo Conde.

El Gobierno de Nicaragua recibirá en principio una participación del 10 por ciento en el consorcio, dijo Conde. El proyecto pasará a manos del Gobierno de Nicaragua al concluir una licencia de 30 años de producción de electricidad.

El financiamiento con los organismos multilaterales debería de completarse a fines de año, agregó.

Conde agregó que el grupo Queiroz Galvao ha invertido desde el 2007 unos 3.5 millones de dólares en la realización de varios estudios de viabilidad de Tumarín.

El director del grupo para Centroamérica, Rogerio Zanforlin, dijo por su parte que el proyecto generará 3,000 empleos directos y que la inyección de hidroenergía permitirá un ahorro de 80 millones de dólares anuales a Nicaragua.