Actualizado 21/08/2009 02:54

Darling de G.Bretaña cauto sobre repunte, precio crudo es riesgo

LONDRES (Reuters/EP) - El ministro de Finanzas británico, Alistair Darling, dijo el jueves que ningún país podía ser complaciente acerca de la recuperación económica, dados los riesgos que representan los altos precios del petróleo y la necesidad de arreglar las hojas de balance de los bancos.

En una columna para la edición del viernes del Daily Mail, Darling dijo que la salida de Japón, Francia y Alemania de la recesión eran noticias bienvenidas para la economía británica.

"Es una señal alentadora de que la acción global coordinada del último año está empezando a dar frutos", dijo.

"Pero un cuarto de punto porcentual de crecimiento no es necesariamente una recuperación sostenida. Estamos en lo correcto al ser cautelosos", afirmó,

Alemania y Francia salieron de largas recesiones en el período de abril a junio, con el Producto Interno Bruto (PIB) de cada uno subiendo un 0,3 por ciento inter trimestres.

La economía japonesa regresó también al crecimiento en el segundo trimestre, con una expansión del PIB de un 0,9 por ciento.

La economía británica siguió languideciendo, contrayéndose un 0,8 por ciento durante el mismo período.

Darling dijo que había riesgos por los precios del crudo y que cada país debería actuar para poner a sus bancos en una posición sólida.

Repitió que se sentía confiado de que Gran Bretaña regresaría al crecimiento alrededor del cambio de año.

El ministro criticó además al líder de la oposición, el conservador David Cameron, del que se reportó esta semana diciendo que había riesgo de que Gran Bretaña pudiera caer en moratoria con su deuda.

"La condescendencia acerca de la economía implicada en la insinuación de David Cameron de que Gran Bretaña podría incumplir su propia deuda, revela su inexperiencia", dijo Darling.

Previamente el jueves, información sobre las finanzas públicas mostró que el endeudamiento neto del sector público tocó las 8.016 millones de libras, cifra récord para el mes de julio, ya que los ingresos fiscales se desmoronaron frente a la peor recesión de Gran Bretaña en décadas.

El Gobierno ha estimado un endeudamiento para el año completo de 175.000 millones de libras para este año.