Actualizado 24/08/2009 19:14

Distorsión economía Venezuela complicaría recuperación

Por Fabián Andrés Cambero

CARACAS (Reuters/EP) - Un cóctel que combina bajos precios del crudo y galopante inflación podría agravar las distorsiones de la economía venezolana, lo que dificultaría al país petrolero retomar la senda del crecimiento luego de arrojar números rojos por primera vez en más de cinco años.

La caída del 2,4 por ciento en el Producto Interno Bruto (PIB) en el segundo trimestre, ante menores ingresos petroleros por la crisis global, no aplacó el alza de los precios al consumidor, que han avanzado un 13,1 por ciento en lo que va de año.

Analistas opinan que los controles de precios y de cambios son, junto con el gasto público, los factores que están impulsando la inflación en momentos en que la actividad económica está sufriendo por la falta de divisas, en un país que importa casi todos los bienes que consume.

La merma en la entrega de dólares al tipo de cambio oficial ha obligado a varios sectores económicos a comprar moneda extranjera en el mercado paralelo a más del triple de la cotización regular, costo que es trasladado al consumidor.

"En Venezuela tienes un tipo de cambio sobrevalorado y no del todo real porque tienes mucha salida de capital y muchas importaciones a precios elevados a raíz del mercado paralelo", opinó Rafael de la Fuente de PNB Paribas en Nueva York.

En tanto, empresarios se quejan de que el control de precios que afecta a alimentos básicos como la leche, el azúcar y el pollo hace más rentable importar que producir en el país "a pérdidas".

El Gobierno del presidente Hugo Chávez ha gastado miles de millones de dólares para adquirir productos alimentarios y colocarlos entre los sectores más pobres del país a precios subvencionados, como parte de los programas asistenciales con los que busca impulsar el socialismo bolivariano.

A MERCED DEL PETROLEO

El ministro de Finanzas, Alí Rodríguez, dijo que la contracción de un 1 por ciento en el primer semestre es "perfectamente recuperable" y confió en que la sostenida recuperación de los precios del crudo sirva para motorizar nuevamente la economía.

Alegó, en una entrevista publicada el fin de semana, que si en los próximos dos trimestres se logra un crecimiento del 1 por ciento se cerraría el año en equilibrio, pero si supera levemente ese resultado se despedirá el 2009 con una modesta expansión.

Pese a esta visión optimista, el Gobierno prepara un segundo paquete de medidas económicas para estimular la economía y reducir las presiones inflacionarias, aunque parece poco probable que se implemente un cambio radical en la actual política económica.

Las acciones irían orientadas a reducir el diferencial cambiario y estimular la producción nacional, especialmente en el sector agrícola, según ha dicho Rodríguez.

Sin embargo, expertos apuntan a que sin una amplia modificación del actual esquema económico, el Gobierno quedaría a merced de una recuperación sustancial de los precios energéticos para evitar atascarse en un cuadro de estanflación, un estancamiento de la economía sin que cedan los precios.

"Sin eso (mayores precios petroleros), el Gobierno continuaría con pocos recursos para estimular la economía doméstica y sin las divisas para inyectar liquidez en el mercado cambiario", dijo David Duarte, analista de 4CAST.

Además, el enfrentamiento entre el Gobierno y la mayor parte del sector privado es otro elemento que complicaría una recuperación, pues el Estado busca fortalecer su peso económico a través de nacionalizaciones de sectores estratégicos.

"El incremento del gasto está declinando debido a una clara ineficiencia en la ejecución fiscal y la rápida expansión del sector público a través de nacionalizaciones y expropiaciones del sector privado", dijo el analista Alberto Ramos en un reporte de Goldman Sachs.

Además, una más lenta recuperación del sector no petrolero, principalmente en manufactura, dificultaría que se genere la demanda necesaria para tener un rebote fuerte de crecimiento.

"Tienes un sector privado agazapado y un sector público con cada vez mayores problemas fiscales", alegó de la Fuente.

(Por Fabián Andrés Cambero, editado por Luis Azuaje)