QUITO, 28 nov, 29 Nov. (Reuters/EP) -
- Ecuador despertó poco interés el jueves entre los inversores extranjeros para explorar y explotar unos 16 bloques petroleros en la selva amazónica, con un potencial de unos 1.500 millones de barriles en reservas.
Una filial de la española Repsol YPF, Repsol Cuba, y la china Andes Petroleum presentaron ofertas para tres bloques, cuya adjudicación llevaría unos cinco meses hasta concretar la negociación con las autoridades ecuatorianas, dijo el ministro de Recursos Naturales No Renovables, Pedro Merizalde.
Dentro del paquete de bloques ofertados, tres ya fueron entregados previamente a la estatal ecuatoriana Petroamazonas para que buscara socios extranjeros para su desarrollo comercial.
Petroamazonas en sociedad con las estatales Enap de Chile y Belorusneft de Belorusia se harán cargo de uno de los tres yacimientos entregados a la estatal.
"A fin de incorporar nuevas reservas que permitan incrementar los niveles de producción del país, el Estado ecuatoriano garantizará la utilización de nuevas tecnologías, operadas por empresas comprometidas con el desarrollo nacional", agregó Merizalde a periodistas.
La convocatoria para la licitación internacional se realizó el año pasado, pero por dos ocasiones se ha cambiado el plazo para presentar las ofertas por pedido de las empresas interesadas en los yacimientos petroleros.
Los bloques se encuentran en las provincias amazónicas de Pastaza y Morona Santiago, cerca de la frontera con Perú y en el borde del parque Yasuní, uno de los más importantes del planeta.
En esa zona, el país andino también espera explotar el bloque Ishpingo-Tambococha-Tiputini (ITT), con unos 920 millones de barriles de crudo en reservas.
Merizalde dijo que las reservas estimadas en los bloques ofertados serían de unos 380 millones de barriles, pero el potencial llevarían a elevarlas a unos 1.500 millones de barriles.
Las empresas que se adjudiquen los bloques firmarán un contrato de prestación de servicios bajo un sistema de fijación de tarifa negociada con cada compañía.
El Gobierno convocará una nueva licitación el próximo año para los bloques que no recibieron ofertas, después de realizar trabajos de sísmica.
La tarea exploratoria tendría una duración de hasta seis años y la de explotación tendría una concesión por unos 20 años, según datos de la Secretaría de Hidrocarburos del país.
La licitación ha despertado fuertes críticas de las comunidades indígenas que habitan en las inmediaciones de los campos y han amenazado con acudir a organismos internacionales para evitar su explotación.
Ecuador produce en promedio unos 520.000 barriles de petróleo diarios (bpd).